tag:blogger.com,1999:blog-8584433328366757542024-02-19T03:57:19.564-08:00Palabras cardinalesLas palabras surgieron para comunicarnos con nosotros mismos, en silencioso monólogo interior, y entendernos con los otros. Como espejo del pensamiento, de la idea o de la emoción, revelan también nuestras coordenadas humanas, quiénes somos y dónde estamos.
Quede este espacio para dejar fluir palabras, las cardinales.Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.comBlogger108125tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-26358476995260656542020-10-24T08:52:00.005-07:002020-10-24T09:52:12.530-07:00Otras cosas extrañas que nos trajo la pandemia<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8HTESHTlqustXBM-pi4TdUhdmpew4ApsTbyMmRFOeZtsAeM28IHolLKlJH2AtFhHtr_SV9RIM6cksP-63uS7-0LBLjyHuyNfbUrnljJ2_jNBns54jP2cV5uVQEP4gXTIdIdDyc9tC4mg/s2048/IMG_20201024_172310_968.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="2048" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8HTESHTlqustXBM-pi4TdUhdmpew4ApsTbyMmRFOeZtsAeM28IHolLKlJH2AtFhHtr_SV9RIM6cksP-63uS7-0LBLjyHuyNfbUrnljJ2_jNBns54jP2cV5uVQEP4gXTIdIdDyc9tC4mg/s320/IMG_20201024_172310_968.jpg" /></a></div><br /><br /><p></p><p>Ha transcurrido este inicio de curso pandémico de una manera, como os dije, ciertamente extraña, entre mascarillas, flechas indicadoras del buen destino y un baño de gel hidroalcohólico (ungüento que las leyendas que relaten los avatares del pasado referirán como bálsamo de inmortalidad, estoy casi segura).</p><div dir="auto">Superadas las primeras contrariedades que nos han llevado a los profesores a rebelarnos contra los gobernantes que nos vapulean mientras sentencian la debacle del sistema educativo, llegó el momento de la verdad, el del cara a cara con el trabajo, con la gesta, tan malentendida y malquerida por la sociedad, de intentar educar a los que deben salvarnos del desastre integral.</div><div dir="auto"><br /></div><div dir="auto">Allí, en la arena, sin más disfraz ni armadura que una mascarilla quirúrgica ni más arma que una tiza, un cable y una pantalla para los más aguerridos, y mucha, pero que mucha paciencia, todos los que defendemos la educación como bandera del desarrollo y la igualdad para todos los ciudadanos, nos sentimos fuertes y comprometidos, a pesar del desdén de quienes nos ven desde las gradas, a pesar de la desmotivación de nuestros pupilos, a pesar de que el amor por el conocimiento ande en fase degradada y quién sabe si al borde de la extinción.</div><div dir="auto"><br /></div><div dir="auto">Frente a la pizarra y una decena de pares de ojos que asoman al borde enmascarillado de su existencia, me olvidé de mi enfado profesional, de la apatía que se me había instalado tras el confinamiento, se esfumó el desánimo por la ventana abierta por donde también esperamos que se vaya el bicho innombrable. En esas dos horas de clase intensiva se produce a veces la magia, cuando el profesor intuye que ha conseguido conectar con el alumno, a veces gracias a un guiño, una sonrisa (ahora obligadamente escondida, pero siempre evidente en el brillo de los ojos), un gesto cómplice que celebra que se ha entendido el concepto, que un aprendizaje empieza a recorrer la galaxia de neuronas para convertirse otro día en ladrillo de nuevos aprendizajes.</div><div dir="auto"><br /></div><div dir="auto">Y entonces, justo cuando empezaba a sentirme a salvo de la confusión generalizada, de la sensación de caos reinante, un día, a la salida del instituto, mientras saboreaba satisfecha el deber cumplido (que tiene regusto a gloria cuando se ha alcanzado el propósito a pesar del contexto desfavorable), me llega la noticia de que alguien ha manifestado un reproche sobre mi persona. Y, según voy escuchando el relato, se me van cayendo los vítores y galardones del triunfo que andaba celebrando. Más podría decir, a juzgar por aquellas nefastas palabras, que nunca debí sentirme vencedora en este improvisado rin en que se han convertido las aulas. </div><div dir="auto"><br /></div><div dir="auto">"Estamos en una pandemia mundial y ella, sin embargo, bajó su mascarilla, incumplió su obligación y nos puso en peligro...". Oh, qué tristeza tan grande saber que mis pobres adolescentes, mis queridos alumnos de la era COVID, no han sabido reseñar de su profesora, de entre todas sus cualidades y defectos profesionales, más que la anécdota de que en alguna ocasión, después de llevar más de una hora explicando, sobreponiéndose a su dióxido de carbono, ante el desconcierto que produce ver al público impertérrito, quizá impasible, y tras pedir permiso para tamaña incorrección, descubrió la nariz para respirar, asegurándose de hacerlo pegadita a la puerta, con la distancia de seguridad, en una clase de apenas diez alumnos y las ventanas abiertas.</div><div dir="auto"><br /></div><div dir="auto">¿Qué hago yo explicando gramática castellana a quien realmente necesita lecciones de lógica? ¿Cómo se explica a estos hijos de la pandemia que en el mundo existen normas ineludibles, pero que, incluso ante las más importantes, existen las salvedades? ¿Debemos ser tan obedientes con el buenismo imperante como para que renunciemos a respirar aunque sea unos segundos por miedo a la censura en estos tiempos convulsos?</div><div dir="auto"><br /></div><div dir="auto">Siento bastante inquietud ante lo que me parece ya una tendencia social. Se nos ha inoculado un terrible virus llamado estupidez que quizá sea el causante de nuestra pronta desaparición.</div><div dir="auto"><br /></div><div dir="auto">Espero recuperar pronto el aliento porque, ya sea sacando la cabeza por la ventana o exiliándome unos minutos en el pasillo, como la alumna desobediente, tomaré aire para volver a entrar a las aulas como si mereciera la pena seguir educando en el sentido común y el espíritu crítico.</div><div dir="auto"><br /></div><div dir="auto"><br style="font-family: sans-serif; font-size: large;" /></div>Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-37289892504771248402020-09-19T09:13:00.024-07:002020-09-19T09:52:53.735-07:00Stranger Things: el regreso a las aulas<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjfXe_g4_-zbJ-jDzfbDDX-opNnTHkL5hVd88cSCavf2sxvRUA83mVqE-DUBJkMowzCyBWtKxHtYJY1ITM0Ajnnd9MR-I0lcIYHStcIz410spnIEvkApQv8jdFO6GRiqYnXV5X8By-7YzU/s1400/Stranger+things.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="800" data-original-width="1400" height="229" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjfXe_g4_-zbJ-jDzfbDDX-opNnTHkL5hVd88cSCavf2sxvRUA83mVqE-DUBJkMowzCyBWtKxHtYJY1ITM0Ajnnd9MR-I0lcIYHStcIz410spnIEvkApQv8jdFO6GRiqYnXV5X8By-7YzU/w400-h229/Stranger+things.jpg" width="400" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; text-align: justify; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Hace apenas unos meses, aun cuando no se había dado por terminado el confinamiento, no sospechaba que esto pudiera suceder. </span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; text-align: justify; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><b>Llegó el verano, que supo a agua de mayo después de un trimestre enloquecedor en el que convertimos nuestros salones en aulas, la cocina, en sala de profesores y el baño, en cuarto de castigo.</b></span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; text-align: justify; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> Nunca fueron tan bienvenidas las vacaciones. Me ha parecido incluso que este verano se ha oído menos eso de “vives como un profesor; quién tuviera tus vacaciones” (provocación que siempre encajo mal y a la que suelo responder “ya sabes, las Facultades de Educación están abiertas y las oposiciones a sufridor docente se convocan regularmente”).</span></div><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;"><br /></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;">De verdad, que no voy a practicar el victimismo, que a mí me gusta mi trabajo; es más, me apasiona, me hacer sentir útil, siento que he sido llamada a esta gran gesta que es la enseñanza (o sea, que esto es vocacional), pero creedme que ejercer de profesor agota, física, pero, sobre todo, emocionalmente.</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;"><br /></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;">Y de eso nos quejábamos hasta hace poco, del estrés de trabajar con adolescentes, de los horarios apretados sin tiempo para preparar clases, del trabajo invisible que todos nos llevamos para las tardes y los fines de semana… ¡Qué bien vivís los profesores! Ja, me río yo… Si al menos contásemos con el reconocimiento social o se nos remunerase en razón al esfuerzo y la dedicación con que nos enfrentamos a la misión…</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><b><br /></b></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><b>Ha hecho falta un confinamiento, que todos los niños y adolescentes de este país estuvieran encerrados en sus casas durante más de dos meses, para que las familias hayan empezado a comprender el valor de nuestro trabajo como educadores</b></span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">, como personas encargadas de custodiar e ilustrar a sus hijos en el camino del conocimiento. Como funcionarios públicos, prestamos un servicio que muy pocos han sabido valorar, hasta que se han visto en la obligación de apoyar a sus hijos con las distintas materias escolares, hasta que han tenido que soportar 24/ 24 horas a sus criaturas en todo su espectro neurótico…</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;"><br /></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;">"Bueno, ya terminó lo peor", pensé en junio, cuando tuvieron lugar todas las sesiones de evaluación virtuales con que calificamos tan generosamente al alumnado, certificando el “ego te absolvo”, el pasaporte al curso siguiente para los aplicados, que lo son con pandemia mundial o sin ella, los vagos incorregibles que entregaron 150 tareas en cuatro días y los coronados para la ocasión con el "san Covid" que todo lo perdona. Alguno se quedó en el camino, claro, porque incluso en esta benevolencia “urbi et orbe” hay quien resulta irrescatable.</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><br /></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Pero </span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><b>lo peor estaba por llegar.</b></span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> Ya en agosto estuve pensando en cómo sería el regreso a las aulas. Estos meses han sido para mí muy enriquecedores, a pesar del fastidio de andar entre las cuatro paredes de mi casa, desbordada de trabajo docente y doméstico, de profesora, de madre, de ama de casa y de esposa que anda preparando su “separamiento”, como lo llama uno de mis hijos. Con todo, de cada crisis surge un aprendizaje y, no sin dolor, para mí ha representado un gran paso en términos de crecimiento personal. Me sentía fuerte para darme un baño de multitudes adolescentes, de 1º de Secundaria a Bachillerato, para pelear con esto de que alguien me escuche mientras hablo de sintaxis o metáforas, para abrirme paso entre los pasillos arrebatados de hormonas dislocadas y saludos de alumnos que solo saben hablar a voces…</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><b><br /></b></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><b>Soñaba con volver a la normalidad, como todos, vaya. Pero la normalidad no llegó</b></span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">, porque, tarde y mal, los que gestionan esto del enseñar quisieron convencernos a todos de que, para que el regreso se produjera en un entorno seguro, los alumnos debían incorporarse escalonadamente, en grupos de no más de veinte y en el caso de los niveles superiores repartidos en dos subgrupos que acudirían al centro en días alternos. Así que el instituto tuvo que prepararse, cambiar sus decorados, para que en las aulas cupieran las mesas necesarias con la distancia de seguridad prescriptiva, para señalizar con flechas la dirección en la que caminar sin darse de bruces con nadie por el pasillo… </span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><b>Geles hidroalcohólicos para ahuyentar al bicho y, ya de paso, ver si se desinfecta la herida de la ignorancia arrastrada por los chicos desde el confinamiento. </b></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><br /></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><b>Más profesores asignados para este plan de contingencia con el que se quiere hacer creer a la opinión pública que la enseñanza es en este país una prioridad. </b>Sin embargo, a finales de este mes de septiembre, se cuentan con los dedos de las dos manos los compañeros de trinchera que aún están por llegar. Aquí los esperamos los demás, mercenarios de un sistema que nos obliga, además de a llevar mascarilla, como cualquier ciudadano de bien, a ejercer nuestra profesión en una situación a todas luces precaria. Ahora no solo hay que enseñar, sino compensar las carencias académicas, tecnológicas y psicosociales de nuestros alumnos desde el formato de la semipresencialidad, no la nuestra, claro, sino la de los alumnos, porque </span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><b>lo que se espera de nosotros en más bien la omnipresencia y la omnipotencia,</b></span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"> ya que habremos de atender a los más pequeños, de 1º y 2º de ESO, que vendrán a diario, con la urgencia de retomar el contacto (en la distancia social eso sí) con esto del instituto, pero también tendremos que satisfacer las necesidades de quienes se queden en sus casas en días alternos, para que, en ningún caso, nadie pueda reprocharnos que no satisfacemos su derecho a la educación. Y para ello,<b> igual ha llegado el momento de formarnos en telequinesia más que en herramientas técnicas</b>, porque las altas instancias pretenden que lo hagamos grabando nuestras clases, o con nuestros móviles o con alguna de las pocas cámaras con las que está dotado el centro, sin red Wifi ni un digno ancho de banda, pero, eso sí, que pasemos lista, que comprobemos que los adolescentes que están solos en sus casas se han levantado a las 8 y no están malgastando su tiempo en dormir o en enredarse entre las pantallas del ocio.</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><br /></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Creo que </span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><b>están urdiendo la gran distopía para la enseñanza. Nos tienen como a cobayas, quieren experimentar qué pasaría si esto de las aulas virtuales hubiera llegado para quedarse</b></span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">, cómo optimizar los recursos para gastar poco en capital humano, comprar una docena de dispositivos y lanzarnos a la nefasta aventura de ser el profesor holograma, que se te presenta después del desayuno y te entretiene y educa al hijo hasta la hora de comer. </span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><b>A mí ya me suena a película, de terror…</b></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;"><br /></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;">Igualmente inquietante y cinematográfica ha sido esta fase de pruebas del experimento distópico. Es el primer día de instituto. Todos los profesores nos saludamos arqueando las cejas por eso de resultar más expresivos ahora que llevamos mascarilla, dándonos ánimo para este nuevo curso, el del Covid del demonio; cogemos una tiza, como gesto aprendido, porque aún dudamos de que utilizarla no vaya a tirar por tierra las medidas de prevención del protocolo. Empiezo a subir las escaleras, siguiendo la flecha que me obliga a mantenerme a la derecha, junto a la barandilla. Levanto la mirada, el pasillo está vacío, casi en penumbra. Ni rastro de los chicos que en febrero recorrían el instituto dos veces antes de llegar a su clase porque así veían al colega repetidor. Nada de besos furtivos de las parejitas de enamorados que entre clase y clase se funden con la pared y se comen el cuello pase quien pase por su lado. Tampoco está el de “profe, ¿me puedes abrir, que me he dejado el bocadillo?”. Silencio. Me ha parecido oír el timbre; se ve que aún no han llegado. Pero la puerta de 1º de Bachillerato está abierta y sale luz. Antes de llegar hasta ella me encuentro a la compañera de Inglés: “Oye, Ana, qué mal rollo, ¿no? Ni rastro de los chicos”. No habían dejado rastro, pero sí habían llegado. Asomé la cabeza por la puerta, por si efectivamente estuviera la clase vacía y se me hizo un nudo en el estómago al comprobar que los alumnos ya habían entrado, se habían sentado, cual ejército, sin salirse ni medio centímetro de su zona de seguridad. Los saludé. No serían más de trece en esta clase. No sé si mascullaron un "hola" debajo de sus mascarillas porque, si así fue, me resultó inaudible. Tampoco fui capaz casi de reconocerlos, aunque sabía por las listas que muchos habían sido ya mis alumnos. </span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;"><br /></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;">Irreconocibles sus rostros enmascarillados, pero más aún su actitud silente y adiestrada. Entro con cierta efusividad, casi teatral, por eso de romper un poco el hielo, pero de poco sirve, apenas si se mueven, quién sabe si por miedo, por espíritu zombi o porque el confinamiento los ha metamorfoseado en unos seres tan evolucionados que olvidaron qué era eso de la algarabía, la impertinencia y la frescura adolescentes. Casi dos horas de clase de presentación con quince pares de ojos que me escrutan y parece incluso que me censuran cada vez que dejo mi nariz asomar por encima de la mascarilla antes de que me asfixie el CO2 que genera una explicación de análisis sintáctico.</span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;"><br /></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;">Pues nada, chicos, ha llegado el momento de que nos echemos el gel hidroalcohólico y limpiemos las mesas. ¿Sabéis qué? Este fin de semana me reúno con mis amigas del "club empiñado en escribir". Tengo que sacarme de la manga un texto que se titule “De película”. ¿Quién sospecha de qué tratará mi historia después de comprobar lo extraño que está siendo todo hoy? ¿Quiénes sois vosotros y qué habéis hecho con mis alumnos? </span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;"><br /></span></p><p dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; white-space: pre-wrap;"><b>Silencio y títulos de crédito. <i>Stranger things</i>...</b></span></p>Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-51084043921199597492020-05-02T03:26:00.000-07:002020-05-02T11:12:01.217-07:00Amor de supermercado<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhiKxM_m0nUT9ZZ56y-fHgzlLuMAyrnuGpzSElwCYQzPDHK60DW-aQ7EcNtxTkPp5OggO68iEiZoxQWd24RtnW0R3mWWSV2uU6rLXLuW36QBs_TX0W8_qTSaGf8WD-EQdkMUlxqIYm__lY/s1600/IMG_20200502_120813_129.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1250" data-original-width="1000" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhiKxM_m0nUT9ZZ56y-fHgzlLuMAyrnuGpzSElwCYQzPDHK60DW-aQ7EcNtxTkPp5OggO68iEiZoxQWd24RtnW0R3mWWSV2uU6rLXLuW36QBs_TX0W8_qTSaGf8WD-EQdkMUlxqIYm__lY/s320/IMG_20200502_120813_129.jpg" width="256" /></a></div>
<div dir="ltr" id="docs-internal-guid-98ea63d4-7fff-b636-6677-1a989ae99445" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<br /></div>
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Es casi la hora. Habíamos quedado en que sería mejor esperar un poco al final de la tarde para que hubiera menos gente, aún menos de la que se deja ver estos días por la calle. Antes del cambio de hora, cuando empezó todo esto, venía a oscurecer a eso de las 8, así que el plan cuadraba si bajábamos una media hora antes. Para cuando regresáramos a nuestro portal, ya se habría hecho prácticamente de noche y resultaría más fácil romper con las distancias y arrancarnos apasionadamente las mascarillas y tocarnos sin guantes. Pero, ahora, en mayo, salir a la hora acostumbrada implica exponerse a la luz vespertina y a los ojos inquisidores de los balconazis del barrio.</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Siempre le digo a mi madre lo mismo. “¿Qué hace falta para hoy? ¿Traigo huevos?... No creo que a estas horas queden tomates o patatas, ya sabes que no. Sí, lejía traigo y papel, pero no te pases, que tengo que venir andando cargado con las bolsas”. Ella sabe perfectamente qué intención hay detrás de mi afán por colaborar con las obligaciones de suministro doméstico.. Conoce a Susi desde que era pequeña y sé que le hace ilusión que salgamos juntos. Siempre me dice, “hijo, es fantástico que seáis vecinos, compañeros de estudios y ahora compañeros de vida”. “Sí, mamá, pero no te flipes, que nadie ha hablado aún de comprarnos una casa o de tener hijos; estamos disfrutando, conociéndonos”. En estos días de convivencia intensiva con mi madre, la he escuchado varias veces decirle a sus amigas por teléfono: “sí, sí, mi hijo Manu es quien me hace la compra y le dejo salir, pobre mío, que a él solo le queda ahora el amor de supermercado”.</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Menos mal que, aunque sea 2 de mayo, es sábado y abrirá al menos el súper del bulevar. Este año ni festivo ni nada, que está Madrid para pocos chotis con esto de la cuarentena y el puto bicho. Nos han quitado las vacaciones de semana santa y ahora el puente, así que por falta de ganas no será, digo, porque si sumamos las semanas que llevamos a las espaldas de aislamiento, estamos todos tan histéricos que bien podríamos proclamar el nuevo levantamiento rebelde de esta ciudad. Por mí, eso sí, hoy mejor no, que se queden otro día más todos en sus casitas, que yo tengo que verme con mi diosa allí, en el pasillo de los yogures, o camino a la frutería, para decirle en voz baja, mientras pesa los kiwis cuánto me gusta pasarme las horas charlando con ella hasta la madrugada, por whatsapp o por el insta…</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">“Anoche estabas preciosa en la foto que te hiciste en pijama con la cerveza en la mano, para brindar como si estuviésemos en nuestro cien montaditos de La Latina… Ay, dios, quién volviera a ese Madrid del mes de enero que nos dejaba abrazarnos bajo las gotas de lluvia de aquel techado. ¡Qué dulces me parecieron entonces tus ojos, Susi! </span><br />
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><br /></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiqoqkVPWOVP5M7646EikiqB-iiBpzyHMujseDlnIX-6SSuawAp9X1AbkyPxetuXd_AoscM9qR9WFErBtQDn_lHxruWqxLYQX4ne3l_y0xoY3BuDeHdwc5LATXPmL_4kbcy5GAgaPzy-l4/s1600/SAVE_20200502_141529.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="923" data-original-width="1600" height="230" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiqoqkVPWOVP5M7646EikiqB-iiBpzyHMujseDlnIX-6SSuawAp9X1AbkyPxetuXd_AoscM9qR9WFErBtQDn_lHxruWqxLYQX4ne3l_y0xoY3BuDeHdwc5LATXPmL_4kbcy5GAgaPzy-l4/s400/SAVE_20200502_141529.jpg" width="400" /></a></div>
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><br /></span></div>
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; text-align: justify; white-space: pre-wrap;">Ella había bajado sobre las 19:25. Justo después de cerrar con ímpetu la puerta de la casa, su madre salió al rellano de la escalera mientras la recadera familiar se dejaba rodar escalones abajo; la llamada del deseo es poderosa y podía escuchar sus requiebros desde dos manzanas más allá. “¡Susiii! ¡Que no se te olvide el jabón de manos, hija, ni los yogures, que tu padre no cena otra cosa!”. Viéndola precipitarse por el vestíbulo del edificio, no parecía que la chica hubiera tomado nota de aquellas peticiones…</span><br />
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Yo aguardaba escondido en el hueco de la escalera. Desde allí pude verla abrir la puerta y salir a la calle. No quise decirle nada para no alterarla; ya me pareció muy agitada al oírla bajar los últimos escalones. Esperé un par de minutos para hacer yo lo propio y lanzarme a la carrera en dirección al supermercado. Nada más atravesar el umbral de nuestro portal y dirigir mis pasos por la acera, pude adivinar la figura de Susi avanzando ya hacia la otra esquina de la calle. Iba tirando de su carrito de la compra. ¡Qué elegante me parece esta chica siempre, hasta con chándal y carrito!</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Habíamos quedado en que nos encontraríamos en el pasillo del pan y las galletas. Y allí mismo la encontré. Con ese porte, no me costó ni medio segundo reconocerla, a pesar de la mascarilla y sus manos de látex. Revisaba las etiquetas de los paquetes de las galletas, disimulando, como si realmente le importase lo del aceite de palma. Miré a mi alrededor; comprobé que no hubiera ningún perseguidor de infractores y me lancé al gran despropósito. Acerqué mi carro al suyo y, antes de que se diera cuenta de que ya había llegado, rodeé su cintura desde atrás, al tiempo que acercaba mis labios a su cuello. “Mi reina, qué bella estás poniendo cara de seria”.</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Susi respingó, como asustada… ¿Estás loco, o qué te pasa? Si nos ve el de seguridad nos multan, idiota… Quiso fruncir el ceño y hacerse la contrariada, pero le pudo más la emoción y el saberse abrazada por un amor furtivo. Al ver mi sonrisa picarona apostada en su hombro, se giró para plantarme un beso eléctrico, fugaz e intenso. Por el rabillo del ojo vi que por el pasillo principal cruzaba una señora mayor que nos miró con gesto de extrañamiento ante la falta de distancia social. “Perdona, -dije improvisando-, ¿podrías acercarme esa caja de cereales que está allí al fondo, porfa?</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Tan pronto desapareció la intrusa, nos echamos a reír por lo bajo. No os podéis imaginar lo excitante que resulta transgredir las normas en estos tiempos tan paranoicos. Que ya me lo ha dicho mi madre antes de salir: “Manu, tú todo con guantes; el látex te protege, te lo digo yo; que nadie te vea que te atreves a coger las manzanas con las manos desnudas que la has liado, ¿eh? Y a Susi la ves, sí, pero nada de tontunas, ni acercamientos, hijo, que la gente está muy rara y hay mucho miedo. Vosotros hacéis como los novios de antes, os miráis, os sonreís y, a lo sumo, os decís un algo amoroso, pero no me hagáis los tontos, que tiempo tendréis”...</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">“Sí, eso mismo me ha dicho a mí la mía, así que, al menos aquí, no te dispares, que además nos tiene que dar tiempo a hacer la compra antes de las 20:00, que nos cierran. Mira, yo aún tengo que buscar el jabón de manos, el pan y las nueces”. </span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Me pone mucho cuando adopta esa actitud responsable. "¡Yo también tengo que ir a por la lejía y los huevos”, pero no puedo desaprovechar ni un minuto, te deseo, necesito oler tu perfume y mirarte, aunque solo sea eligiendo entre el pan rústico y el de hogaza. Paso muchísimas horas al día, más de las que tiene, yo creo, encerrado en las cuatro paredes, pensando en ti, soñando contigo, recordando nuestros paseos, los conciertos, las estrellas cuyos nombres me enseñaste aquella noche de invierno. Me da igual, qué lejía ni qué hostias. Si tú compras nueces, yo avellanas. Te acompaño al pasillo. Mientras Susi elegía entre las de Macadamia y las de California, me atreví de nuevo, esta vez a besarle el cuello.</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">“¡Estás como una cabra! ¿Lo sabes, no? Como nos llamen la atención, a ver con qué cara venimos el jueves. Y, si nos multan, mi padre me aplica otra cuarentena, hasta agosto lo menos.</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">“Estimados clientes, les informamos que este supermercado cerrará sus puertas dentro de diez minutos. Vayan acercándose a la línea de cajas. Les agradecemos su confianza”.</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Cogimos las avellanas naturales y las nueces con cáscara y nos dirigimos arrebatados a la cola para pagar. </span><br />
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><br /></span></div>
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- “Sepárate un poco, no vaya a ser que la cajera ya ate cabos. Llevamos muchas semanas haciendo lo mismo”.</span></div>
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">-Yo creo que no es la misma tía, no te rayes, anda.</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Susi levantó una ceja sonriendo mientras iba poniendo su compra sobre la cinta. Cuando yo quise hacer lo mismo, ella ya salía por la puerta del súper, así que quise darme más prisa, porque ya debían ser casi las 20.00.</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Metí todo en las bolsas a lo loco. Tenía que llegar más o menos al mismo tiempo que ella. Otro día más, caminando ya los dos por la acera que nos lleva a casa, pudimos deleitarnos con la ovación del vecindario. Puntuales siempre, allí estaban todos en sus balcones, con sus arco iris y su música a todo trapo. Susi y yo comentábamos luego lo gracioso y emocionante que resulta que parezca que todos te aplauden. “Es que saben que somos amantes de estraperlo, ¿sabes? y están ahí viéndonos, como espectadores de un teatro, emocionándose con nuestras idas y venidas, nuestros carros cargados de tomates y de besos, jajajaj”. Nos molaba sabernos admirados por el pueblo de Madrid.</span></div>
<br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Sonaba aún el "Resistiré" que siempre pone nuestra vecina del tercero a todo volumen, cuando alcancé el portal. No haría ni tres minutos que Susi había entrado. Dejé todas las bolsas en el suelo para poder abrir la puerta. Me sudaban las manos con los guantes puestos, así que me los quité, tembloroso. Tenía ya los nervios agarrados en el estómago.</span></div>
<br />
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; text-align: justify; white-space: pre-wrap;">Recogí mi compra </span><span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; text-align: justify; white-space: pre-wrap;">rápidamente. No había tiempo que perder. Teníamos que aprovechar el jolgorio vecinal, el ruido y la variedad musical para hacer esos minutos fugaces más largos. Ella y yo sabíamos lo que pasaría, lo que siempre pasaba. Entré al portal y sin más dilación fui a su encuentro. Allí estaba, debajo de la escalera, sonriente, como una niña que espera al compañero de travesuras. Ambos sabemos que un encuentro furtivo como este está perseguido por la inquisición colectiva. </span><br />
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; text-align: justify; white-space: pre-wrap;"><br /></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbs-0L17LxNUFrO-oUH-oeWjFnE9csKsmDyTLNPrRde1JKYzI5wob6DThHFtZtKxULb1pPgcwceTpv2eVZtEWAG_RMzyJWF0SML_tFDhiziVtggIh1pEvTW-fx0ZLedGL0HnyLtnOJN8o/s1600/images.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="168" data-original-width="300" height="223" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbs-0L17LxNUFrO-oUH-oeWjFnE9csKsmDyTLNPrRde1JKYzI5wob6DThHFtZtKxULb1pPgcwceTpv2eVZtEWAG_RMzyJWF0SML_tFDhiziVtggIh1pEvTW-fx0ZLedGL0HnyLtnOJN8o/s400/images.jpeg" width="400" /></a></div>
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; text-align: justify; white-space: pre-wrap;"><br /></span>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Comenzamos a besarnos, la agarré de la nuca, acariciándole el pelo como sé que le gusta. Nos fundimos contra la pared mientras nos buscábamos acaloradamente. Sentía cómo la cadencia de su respiración se iba acelerando más y más; las caricias se estaban convirtiendo en una verdadera declaración de intenciones.</span></div>
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 12pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">"Me gustaría tener más tiempo para preámbulos -me dijo susurrando-, pero ahora que la gente está entretenida con el santo ritual, no podemos desperdiciar ni un instante". Entre besos húmedos llenos de pasión, con algún mordisco fogoso de por medio, Susi me cogió la mano adentrándola bajo su licra ajustada. Con el primer impacto de mis dedos, tembló, suspiró, entre el deseo, la calma y el placer. </span></div>
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 12pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Después fue ella quien me buscó, arrebatadamente, bajo el chándal y me encontró, ¡oh, dios, vaya que si me encontró! Durante unos minutos, nuestros cuerpos retorciéndose bajo la escalera, temblorosos, movieron nuestro centro de gravedad, trastornando (estoy convencido) la frecuencia cardíaca de todo el vecindario... Me emociona siempre verla disfrutar, temblorosa. Le apretaba de la cintura, besándole el cuello y mordiendo sus labios. </span></div>
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 12pt; text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">"</span><span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">¡No puedo más! dime que has traído protección". Le contesté que sí, pero le susurré: "¿Nos dará tiempo? Sus ojos me respondieron afirmativamente, picarones. Nos desvestimos, no demasiado; había que tener tiempo para reaccionar en caso de intrusión. Se dio la vuelta; yo la abracé por detrás. Más allá del placer físico, recuerdo, entre idas y venidas, rodear su cintura con una mano y pasar mi brazo por sus axilas, cogiéndola del hombro, desde delante hacia atrás, oler su pelo y su cuello, mientras apoyaba mi frente sobre su nunca. "Huele a paz, a sosiego y felicidad", pensé, si a eso se le puede considerar pensamiento consciente. Susi se retorcía y temblaba intentando contener cualquier ruido que delatase nuestro “incivismo”. </span></div>
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 12pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Me costaba cada vez más coordinar los movimientos, luchaba contra los gritos sordos que se apoderaban de mí; la apretaba más y más fuerte, pero lo hacía entre el cariño y la potencia emocional previos a la explosión. Sus piernas trémulas me avisaban de que el momento estaba a punto de llegar. Habría estado bien tener a todos los vecinos de espectadores de la escena final y, con ella, la ovación popular. Nos agarramos las manos, tan fuerte como quienes se agarran a la vida, pletóricos de éxito, deleitándonos aún con los temblores erráticos del éxtasis último.</span></div>
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 12pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Nos despedimos con un cálido y rápido abrazo y mi beso entre la comisura de los labios y su nariz. "Te quiero", le dije. "Y yo a ti. Esto pasará pronto y disfrutaremos de los momentos y los besos sin miedo", me respondió mientras miraba el reloj. </span></div>
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 12pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">"No sé yo si podremos besarnos alegremente después que pase todo esto", le dije, "la gente va a estar en plan </span><span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; font-style: italic; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">“no me toques ni con un láser atado a un palo”</span><span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">. Susi se rio. Yo quise silenciar su carcajada con un gesto para avisarla de que nos podían pillar. </span></div>
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 12pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial"; font-size: 14pt; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Miramos el reloj otra vez; había que volver a la nueva normalidad. Ella asintió y yo, antes de ponerme los “profilácticos de mano”, altamente recomendados por mi madre, le toqué la cara y le sonreí. Se marchó escaleras arriba, vigilante, buscando moros en la costa. Yo hice lo propio, regresando a esta “nueva no normalidad”, a la espera de otra excusa, otra oportunidad, para nuestro amor de supermercado</span></div>
Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-3001662553809778802020-04-24T15:01:00.001-07:002020-04-24T15:01:48.381-07:00Feliz día del Libro en los tiempos del Coronavirus...<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRd8Pc1O3eAg-iYtDzmrlxVNQnH1CGnTskQmP38LHbu77CQUOhfnereRpqKsSaGyQE5XO698YER7LBUuvt_gc-DCx1SuMvOLFPaBOAymClAw18D4vDL0QpuyxSR4bm3XCf71Zs9Gf9DM8/s1600/Screenshot_2020-04-25-00-00-23-190_com.miui.videoplayer.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="758" data-original-width="1600" height="151" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRd8Pc1O3eAg-iYtDzmrlxVNQnH1CGnTskQmP38LHbu77CQUOhfnereRpqKsSaGyQE5XO698YER7LBUuvt_gc-DCx1SuMvOLFPaBOAymClAw18D4vDL0QpuyxSR4bm3XCf71Zs9Gf9DM8/s320/Screenshot_2020-04-25-00-00-23-190_com.miui.videoplayer.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<iframe allowfullscreen='allowfullscreen' webkitallowfullscreen='webkitallowfullscreen' mozallowfullscreen='mozallowfullscreen' width='320' height='266' src='https://www.blogger.com/video.g?token=AD6v5dysOQHp05L80QsbYmYisjdrZ8FYDYT7cahls0JhvOFXosfyfGarL9LxPW3ujIrfAszMqg6soXlTILz6MtNlVQ' class='b-hbp-video b-uploaded' frameborder='0'></iframe></div>
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<br />Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-39771349890442839512020-04-18T15:40:00.001-07:002020-04-18T15:40:56.493-07:00Audiorrelato: "Sol de invierno. Cómo te enamoras de la vida", por Dio Sinequanon, en la voz de Emilia Ruiz<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiim73_KWu8lpmCNKKk7NInnmPqdLJwMpJTUu9RUaiwa4oU0ZVfljiNNEYc6SsHflXKQwFZRpwgNVqO6TE1uRMCeAAMOx0z_uvRvG0l3u-JmL_5OrY3fk-6tP-bed8SLoTGzjY9o17Csfw/s1600/Screenshot_2020-04-19-00-39-24-177_com.miui.videoplayer.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="758" data-original-width="1600" height="151" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiim73_KWu8lpmCNKKk7NInnmPqdLJwMpJTUu9RUaiwa4oU0ZVfljiNNEYc6SsHflXKQwFZRpwgNVqO6TE1uRMCeAAMOx0z_uvRvG0l3u-JmL_5OrY3fk-6tP-bed8SLoTGzjY9o17Csfw/s320/Screenshot_2020-04-19-00-39-24-177_com.miui.videoplayer.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
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<iframe allowfullscreen='allowfullscreen' webkitallowfullscreen='webkitallowfullscreen' mozallowfullscreen='mozallowfullscreen' width='320' height='266' src='https://www.blogger.com/video.g?token=AD6v5dxd8Mfm39DwHCvQiYCC9kRcjPtGSHUizxyqAtsewhAPCPA7jR_sUyqzLgTRzuFvfS6tecfNCrujFwOrX2Kp5g' class='b-hbp-video b-uploaded' frameborder='0'></iframe></div>
<br />Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-75915386264960338442020-04-18T15:20:00.001-07:002020-04-18T15:22:55.705-07:00Audiorrelato: "Un día cualquiera", por Dio Sinequanon, en la voz de Emilia R. M. <div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEigBWq8QY9ju7DvLgoaoYhcZkTKC5MF-VhXcYOJzkDkrINCaDx7JClNQyUp8vlWscx3Mtk34RqzylMbES-G2JC0lN0E68GSI-2rg55-_9c5codXi8RZuw8ZI4eyL_6xRhstV5OGdTWWmqw/s1600/Screenshot_2020-04-19-00-22-06-121_com.miui.videoplayer.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="758" data-original-width="1600" height="151" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEigBWq8QY9ju7DvLgoaoYhcZkTKC5MF-VhXcYOJzkDkrINCaDx7JClNQyUp8vlWscx3Mtk34RqzylMbES-G2JC0lN0E68GSI-2rg55-_9c5codXi8RZuw8ZI4eyL_6xRhstV5OGdTWWmqw/s320/Screenshot_2020-04-19-00-22-06-121_com.miui.videoplayer.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
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<br />Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-18394417196601619052020-04-18T14:26:00.000-07:002020-04-18T14:30:59.446-07:00Un sinsentido<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhqndhM86hZRcMaILyMY_hbRnZHpNOZ1M7nPN4Q-9U1Z4jk4ss2j6vZYX3iFl0PW6YfZwPJxTPEGWf2XN4wjDQxKTqHPTEg3uWcgZmJCWVwetrqqEK_ZCxTJbBIuU2bb1OOmnG4CZO2QSo/s1600/IMG_20200418_192529_387.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="800" data-original-width="1220" height="261" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhqndhM86hZRcMaILyMY_hbRnZHpNOZ1M7nPN4Q-9U1Z4jk4ss2j6vZYX3iFl0PW6YfZwPJxTPEGWf2XN4wjDQxKTqHPTEg3uWcgZmJCWVwetrqqEK_ZCxTJbBIuU2bb1OOmnG4CZO2QSo/s400/IMG_20200418_192529_387.jpg" width="400" /></a></div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
Si me preguntáis qué siento hoy os diré que cierto estatismo vital... Mi percepción del mundo parece distorsionada y extraña por la falta de contacto con el entorno y los contornos, los que podrían decirme que hoy es 18 de abril y es primavera, los que me traerían la intensidad de la tierra mojada, de las gotas de lluvia sobre el verde de la montaña, los lilas recién nacidos que mis ojos ahora solo recuerdan. La suavidad de la hierba fresca en la palma de mi mano es una evocación lejana que me transporta al mundo que era antes de hoy, el que anhelo y proyecto sobre un futuro que quiero que huela a verdad.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Saboreo entre los recovecos de mi cerebro el suave licor que disfrutaba, entre risas, al final del invierno, cobijada por la calidez y ternura de los abrazos envolventes, de los besos que se congelaron en el tiempo a la espera de la caricia estival que los reviva... Huele este aire a cierta tristeza, casi palpable, al tedio que me saluda desde la ventana del sueño nada más abrir los ojos. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Solo atino a ver en mi casa de los sentidos a los mismos de siempre, en el lugar de siempre, intentado recuperar la alegría de otro tiempo frente a la tarea repetida de vivir en este eterno bucle de puerta cerrada y amargura en los labios.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Solo me salva de la perdición y el olvido el susurro vivaracho de los pajaricos, que me cantan por dentro desde el azul silencioso; vive el cielo de este mundo un poco extrañado por no vernos deambular como hormigas adiestradas por nuestros alocados caminos y existencias vacías.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
No puedo más que soñar con llenarme esta noche de los perfumes de antaño, los que me devuelven el color de los besos que saben a luz, a amarillos silencios entre los olivos, a la seda de la mariposa con la paz en las alas.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Perdónenme los sentidos porque la belleza confunde hoy mi alma.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
#CincoSentidos</div>
<div style="text-align: justify;">
#SinSentido</div>
<div style="text-align: justify;">
#Sentimental</div>
<div style="text-align: justify;">
#Sensible</div>
<div style="text-align: justify;">
#Sensitiva</div>
Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-56425630582327678362020-04-02T15:18:00.001-07:002020-04-02T15:23:34.965-07:00No sé...<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhFUv2US1FfE6UJWN2QGWbuu46frfCt_yLgcOXv2_tmghTLUg6ZWGlBR8av31Fdz-tqPxDe7iwxJtliRWM8gbzVbmf4R4_Go2y4Zg9mpPOApjIjsoXPlCvCQxeVFaqgqwKxDixYZvWVgKU/s1600/IMG-20200402-WA0151.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1000" data-original-width="1500" height="213" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhFUv2US1FfE6UJWN2QGWbuu46frfCt_yLgcOXv2_tmghTLUg6ZWGlBR8av31Fdz-tqPxDe7iwxJtliRWM8gbzVbmf4R4_Go2y4Zg9mpPOApjIjsoXPlCvCQxeVFaqgqwKxDixYZvWVgKU/s320/IMG-20200402-WA0151.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<iframe allowfullscreen='allowfullscreen' webkitallowfullscreen='webkitallowfullscreen' mozallowfullscreen='mozallowfullscreen' width='320' height='266' src='https://www.blogger.com/video.g?token=AD6v5dyJ5tlh55CRUyDOw_h4qnhKf65j9DRVOBEDWSnHhjO79DtUhqIoymN7Cj_AIooPMr_suKYMXBt7tKMD4ZbHSg' class='b-hbp-video b-uploaded' frameborder='0'></iframe></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
No sé cómo será el mundo detrás de esta primavera sin esquina...</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-89480367887533715852020-01-24T12:25:00.002-08:002020-01-24T12:25:36.030-08:00Planeta Mariposa<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjzd1rqQ7nkviCgb6C4BA8Jv0p8q6J6M53gcd-ra9Y8abnshvuFOe-D85Ml2bdcGuM48xsF1GXma9G18A0e_N3vQS4lL7DAOmA-y-S0BHgY0heBZKe-MMm87qKe5bcdQfd_va-yLckUCdg/s1600/mariposas_021.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="600" data-original-width="400" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjzd1rqQ7nkviCgb6C4BA8Jv0p8q6J6M53gcd-ra9Y8abnshvuFOe-D85Ml2bdcGuM48xsF1GXma9G18A0e_N3vQS4lL7DAOmA-y-S0BHgY0heBZKe-MMm87qKe5bcdQfd_va-yLckUCdg/s400/mariposas_021.jpg" width="266" /></a></div>
<br />
En el planeta Mariposa no existe amanecer en que no raye al alba un tenue sol de invierno, aunque sea primavera, que tiernamente abraza a los enamorados, y que huele a leña quemada y a tímida lluvia que nunca cala.<br />
<br />
Allí, suben y bajan escaleras a ninguna parte, no hay camino que te pierda ni conduzca pues no espera en el horizonte destino alguno para quien nada busca.<br />
<br />
Es mi planeta un ingrávido aleteo para esta Mariposa que hoy levanta el vuelo sobre ruinas de imperios pasados que solo atinan a temblar, mirándola en lo alto batir infinitos colores en el azul del futuro.<br />
<br />
Llegan mecidas por el cielo estrellas que mudaron fugacidad por eterna calma placentera.<br />
<br />
Dibujan sobre lo oscuro esta hermosa partitura que guía, entre caricias y besos, melodías hechas de tiempo presente, de belleza transformada en abrazo que no entiende ni espera a la muerte.Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-11445919419720714902019-11-05T10:44:00.000-08:002019-11-05T10:57:00.193-08:00Se muere el mar de todos... Me lo dicen los peces...<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhlI76lcEkYwBSfb3gEhDP2jATJKGNLaYoPo2O1m4DyiNZcqGwbZz92cU-qsEHzp-uwB5JP3SrgKRuxshAaOF2NOaPQvg4rQ18no5igt1SeXdgKWjHlc8_q7-VjBis1-w9BvqGLlXdeFvw/s1600/descarga.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="183" data-original-width="276" height="265" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhlI76lcEkYwBSfb3gEhDP2jATJKGNLaYoPo2O1m4DyiNZcqGwbZz92cU-qsEHzp-uwB5JP3SrgKRuxshAaOF2NOaPQvg4rQ18no5igt1SeXdgKWjHlc8_q7-VjBis1-w9BvqGLlXdeFvw/s400/descarga.jpeg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: sans-serif; font-size: medium;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: sans-serif; font-size: medium;">Cuentan los nómadas de este mundo que uno no termina nunca de abandonar la tierra que lo vio nacer; que por muy anchos que sean los mares que cruzaron e infinitos los kilómetros recorridos siguiendo los pasos de la incierta fortuna, siempre se lleva prendido en el alma el perfume del país, ciudad o aldea que nos lanzó un día a explorar la vida y sus avatares.</span></div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
<br /></div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
Así siento yo que vienen conmigo aquellos aires húmedos, que pocas veces saben a lluvia, y huelen a azahar, a dulzón verde de invernadero, a palmera que cimbrea sus brazos a la orilla del mar. </div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
<br /></div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
Traen las leves olas la otra esencia, de arena y salitre pegados al barco con que sueño que lanzo mis redes para atrapar al elegante caballito y traerlo conmigo hasta esta montaña que hoy me cobija.</div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhxYAMgvoztGpzGsxNeOfZ_cDqyjAy9MJXw99CshOqAk5hlOryzg8QGTPwpUm5BcDivySAW8TSMc0n8sg-S2rFFvSQZ2n8SsUuDgx0kAXit53T8wNt-kyB7RRyLtFityrYhmiHqaijpiqY/s1600/playa-de-la-ribera_1248171.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="735" data-original-width="980" height="298" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhxYAMgvoztGpzGsxNeOfZ_cDqyjAy9MJXw99CshOqAk5hlOryzg8QGTPwpUm5BcDivySAW8TSMc0n8sg-S2rFFvSQZ2n8SsUuDgx0kAXit53T8wNt-kyB7RRyLtFityrYhmiHqaijpiqY/s400/playa-de-la-ribera_1248171.jpg" width="400" /></a></div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
<br /></div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
Y por eso me duelen también las heridas de mi tierra, las que trajeron las aguas salvajes de tantos septiembres, cambiando sus calles por insondables y temibles ríos que buscan el azul de siempre para ir a morir. </div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
<br /></div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
En esta tierra adoptiva, donde el otoño se puebla de hojas caídas, siento yo mientras las piso como si me subiera el agua fría que inunda y asola mi huerta lejana, mi trémulo mar del que huyen los peces.</div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
<br /></div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
Boquean agónicos en mi garganta. Me susurran, ya moribundos, su funesto presagio. Dicen que morirán muchos más en otros lugares, que su huida de este pequeño mar anuncia lo que, si no les escuchamos, nos vendrá. Oíganles, nos lo dicen sus ojos, estáticos casi, sobre la arena donde ayer jugábamos y soñábamos con las estelas del caballito de mar.</div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhju6uPDHkg31ZN-JmVYZlXqI53-ojl4OdKXR59qyB-X8qg2_h-Ft0jBu8R4Cbm8q_e-jdWRBE2lou8ubStlw0ZXYuzENxPI8hDI1VkKYmu0_2EeHi0S1Im_PjzUrYnEtz7KAZ1qqGVa50/s1600/EuropaPress_2423158_PECES_APARECIDOS_MUERTOS_EN_LA_PLAYA_DE_VILLANANIT_20191012171043-k90B-U47946933506chG-992x558%2540LaVanguardia-Web.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="556" data-original-width="987" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhju6uPDHkg31ZN-JmVYZlXqI53-ojl4OdKXR59qyB-X8qg2_h-Ft0jBu8R4Cbm8q_e-jdWRBE2lou8ubStlw0ZXYuzENxPI8hDI1VkKYmu0_2EeHi0S1Im_PjzUrYnEtz7KAZ1qqGVa50/s400/EuropaPress_2423158_PECES_APARECIDOS_MUERTOS_EN_LA_PLAYA_DE_VILLANANIT_20191012171043-k90B-U47946933506chG-992x558%2540LaVanguardia-Web.jpg" width="400" /></a></div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgg7K4tIR2QfsJXK7KrmyoxRFtSBDwvsXXIlAga9UYoGsQh0rTNpAdemjOzMwwJY-h51ObcwVqPsdTDb7O0_QE_dWykV2XzVFR61npbAr_vUEtVoxtuJVatHuNqcxLglTguzIXBge7Ur5Q/s1600/Peces-muertos-orilla-Mar-Menor_EDIIMA20191014_0171_5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="857" data-original-width="643" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgg7K4tIR2QfsJXK7KrmyoxRFtSBDwvsXXIlAga9UYoGsQh0rTNpAdemjOzMwwJY-h51ObcwVqPsdTDb7O0_QE_dWykV2XzVFR61npbAr_vUEtVoxtuJVatHuNqcxLglTguzIXBge7Ur5Q/s400/Peces-muertos-orilla-Mar-Menor_EDIIMA20191014_0171_5.jpg" width="300" /></a></div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large; text-align: justify;">
<br /></div>
Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com8tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-120761172822851382019-10-19T08:46:00.000-07:002019-10-19T15:02:50.441-07:00Silencio<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiUtFnLNEb0s-zwtGKQGsU9p44TMaIXgdDdS-MSR7YPNaD2k3IX2vnT2wDOFMsxFj36hIBlofUIOaVB_-QpGJurhZ04fqG6ALIAROS5KlBiKOkIQn12MGxaoUSqiemLCsvuPof-EG1osLY/s1600/images+%25283%2529.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="168" data-original-width="300" height="224" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiUtFnLNEb0s-zwtGKQGsU9p44TMaIXgdDdS-MSR7YPNaD2k3IX2vnT2wDOFMsxFj36hIBlofUIOaVB_-QpGJurhZ04fqG6ALIAROS5KlBiKOkIQn12MGxaoUSqiemLCsvuPof-EG1osLY/s400/images+%25283%2529.jpeg" width="400" /></a></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Regreso del sueño cada mañana, en silencio, justo el que necesito para ordenarme por dentro, para recordar quién soy y qué me espera en el mundo, ahora que tengo los ojos abiertos. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Necesito el vacío de palabra para recobrar las ganas y lanzarme al día. Desaconsejo que nadie perturbe el momento de mi liturgia en silencio, la del café humeante y la mirada perdida.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Falta al menos una hora para que pueda ser capaz de sonreír, después de dar gracias por todo lo que tengo y tomar conciencia de que la vida merece mucho la pena. Esa gran verdad cósmica me es revelada por el silencio, en silencio.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Se rompe la magia imperturbable cuando se van despertando mis hijos, de uno en uno, haciendo aumentar a cada minuto el nivel de ruido y agitación. No importa, no zozobres, que con hijos chillones también resulta apetecible vivir, me digo, mientras contengo el grito en la garganta con el que reprocharles que no obedecen a ninguna de mis indicaciones y van a conseguir que el vecino de al lado quiera mudarse de barrio.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Recobro el silencio y la calma en el justo momento en que dejo a los ruidosos en el colegio. Me despido de ellos mientras suben la escalera, que se me antoja larga y tardona. Una sonrisa se me dibuja en los labios sabiendo como sé que media hora de silencio en el pensamiento me separa del próximo baño de estruendo del aula. Aun con la música estridentemente alta, siento con satisfacción que puedo navegarme el alma, abstraída frente al parabrisas y el horizonte.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Llego al trabajo. Con un pie en mi clase, después del efusivo saludo a los compañeros y alumnos, compruebo que no soy la misma que se despertó al rayar el alba, que en ese escenario donde soy profesora me siento llena de ilusión y energía. Sonrío y me muevo con seguridad y soltura. Creo que convenzo a todos de que me gusta lo que explico y de que aprenderlo puede procurarles a ellos la misma felicidad. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
"Profe, tú es que siempre sonríes". "No te creas, amigo, que yo siempre me despierto escupiendo fuego, enfadada con todo y con todos porque habría preferido quedarme aferrada al silencio de la noche".</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
A pesar de la alegría que me embarga la mayor parte de los días en el trabajo, hay varios e insufribles momentos en el transcurso de las clases en los que vuelve a saltar por los aires el equilibrio. "Shhhh, shhhh, silencio!!!!" ¿Queréis dejarme terminar la frase? ¿Por qué chilláis así, como polluelos hambrientos y enloquecidos? Silencio, silencio, por favor. Hasta que no calléis, no sigo. No siento que respetéis mi esfuerzo por abrir la ventana de vuestros cerebros...<br />
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Se me frunce el ceño. Pienso entonces en lo vulnerable que es la paz interior, en cuánto ruido nos ensordece y colapsa. Comprendo al observar a mis alumnos que, en realidad, no hay mala intención en su comportamiento. No saben ser de otra manera, porque les han enseñado a ser así, a hablar siempre para opinar siempre, porque alguien pensó alguna vez que no se puede privar a los niños de su libertad de expresión, no se vayan a traumatizar los pobres. </div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Me doy cuenta de que no solo debo enseñarles la vida de las palabras, cuántas existen y cómo se ordenan para nombrar el mundo, sino que, también, están pidiendo a gritos alguien que les calle la boca, que les enseñe el valor del silencio, para escuchar lo que los demás nos tienen que contar, para aprender a corresponderles solo cuando es oportuno y pertinente. Porque en silencio es como dejamos trabajar a nuestra mente; saber callar es la fórmula prudente para no invadir el espacio de los demás, en silencio es como podemos apreciar la belleza de la poesía y la música, elegantes quebrantadores de mi calma.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Shhhh, shhhh, contened la palabra, no me robéis " las ganas de tener ganas" de hablaros y sonreíros, ensordeciéndome ahora el oído y el alma.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Silencio, que en silencio llegamos al día, y a la vida, y en silencio nos vamos al sueño, que todo lo acalla. Me siento a esperarlo, olvidada del ruido del día, que tanto me espanta...</div>
Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-12175514957821485032019-09-28T13:42:00.001-07:002019-09-28T13:43:05.766-07:00El bípedo parlante<div dir="ltr" style="font-family: sans-serif; font-size: 18.048px; text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjcPn6tq3lK0KfpwKv3hAB2xd-v4QqEyew8DNbE8VWoh4t0Q-9LXYk1fCrzFfBKrE3x6VFo2tbE8mbPeNp5mAscjPAkSaPxJObe4FmDC0bZiig8ygHca5DYkyGskBKtrDwg_H3w6MUeuQk/s1600/neandertal_familia.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="488" data-original-width="737" height="263" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjcPn6tq3lK0KfpwKv3hAB2xd-v4QqEyew8DNbE8VWoh4t0Q-9LXYk1fCrzFfBKrE3x6VFo2tbE8mbPeNp5mAscjPAkSaPxJObe4FmDC0bZiig8ygHca5DYkyGskBKtrDwg_H3w6MUeuQk/s400/neandertal_familia.jpg" width="400" /></a></div>
<br />
En alguna de las primeras clases de mi asignatura suele salir el tema del <b>lenguaje humano, ese maravilloso don, espejo de nuestra inteligencia y de nuestro mundo interior</b> que los profesores nos esforzamos por desmenuzar para desentrañar su esencia e intentar insuflar en nuestros alumnos el amor por la palabra.<br />
<br />
Según sabemos, ya l<b>os Neanthertales contaron con un sistema de comunicación bastante parecido al código verbal del Homo Sapiens Sapiens.</b> Haciendo un ejercicio de humildad, a sabiendas de que esto del hablar nos viene de lejos y nosotros, los humanoides parlantes del siglo XXI, no somos los únicos elegidos, nos arriesgamos a jugar con la imaginación: "Profe, los "homo esos" seguro que dirían cosas como "comer", "cazar", "peligro", "bisonte"...". No está nada mal la hipótesis; es lógico, pero yo les sugiero algo incluso más sencillo y también, más humano.<br />
<br />
<b>Cerramos los ojos y viajamos con la mente</b> hasta una sima, la de los tiempos en que no había nada de nada, ni carreteras ni casas, alrededor de nuestra cueva. Nos adentramos en su oscuridad, sin miedo cuando escuchamos a los murciélagos, y nos dejamos guiar por un leve resplandor.<br />
<br />
Una vez allí, adivinamos una figura que suponemos de mujer, pues entre los brazos estrecha al pequeño de la familia. Arropados por la hoguera, los dos nos parecen casi uno, porque el bebé se esconde al cobijo de su madre, que lo amamanta y arrulla entre sonidos casi melódicos.<br />
<br />
Crepitan los restos del fuego, y vemos, sorprendidos, que <b>no nos diferenciamos tanto de los Neanderthales</b> en las cuestiones más primarias. De repente, el lactante separa la cabeza del pecho materno, levanta la mirada para examinar su rostro, casi en sombras; no importa, el afecto de una madre puede sentirse hasta con los ojos cerrados. Juega entonces con la boquita para hacer sonidos con los que llamar su atención; ya sabe juntar los labios y hacer salir de allí algo que suene bonito y que haga que ella lo mire.<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7C0BRs5AnB8cfH7fkq-orKayQaR5Imx0T2yHWYIAug2AfCZWm1PKChZqeUUWTQ3Kezqs7MqGtl2mw5HrhrED47U4230xVcv7emCjywG-ux6ppAHziKfvYNNaAZk_kzjdJ5-ZkAxTV860/s1600/691x430.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="430" data-original-width="691" height="248" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7C0BRs5AnB8cfH7fkq-orKayQaR5Imx0T2yHWYIAug2AfCZWm1PKChZqeUUWTQ3Kezqs7MqGtl2mw5HrhrED47U4230xVcv7emCjywG-ux6ppAHziKfvYNNaAZk_kzjdJ5-ZkAxTV860/s400/691x430.jpg" width="400" /></a></div>
<br />
<b>Y sin saber que estaba siendo el primer arquitecto del lenguaje</b>, casa una sílaba con la siguiente, igual que la primera, para no arriesgar demasiado, y de su boca brota la palabra, la semilla, el germen de todas las venideras. <b>Él dijó "mamá" y su madre ya tuvo nombre</b>; ella lo miró; congeló por un momento su gesto, quizá sorprendida de ser llamada por primera vez, e inmediatamente <b>dibujó una amplia sonrisa, buscando en su cerebro y su corazón otra palabra con la que corresponder aquel regalo </b>y bautizar a su "hijo", al suyo y a todos los hijos de la historia del mundo.</div>
<div dir="ltr" style="font-family: sans-serif; font-size: 18.048px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div dir="ltr" style="font-family: sans-serif; font-size: 18.048px; text-align: justify;">
<b>Desde aquel mágico y cálido instante en la cueva, la especie empezó a ser humana</b>. El origen de nuestra privilegiada condición quedó formulada en dos contundentes sílabas ("ma-má"), coincidentes en casi todos los idiomas, y que, casi con seguridad (no científica, claro está) deben estar ya cifradas en nuestro código genético, en nuestro ADN de bípedo parlante.</div>
Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-74693897075559806822019-05-20T14:26:00.001-07:002019-05-21T14:31:32.524-07:00"Juego de tronos o la triste historia de la humanidad", por Eva Rey Ureña<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPBOfiJzQmLXw1c8AZo_3Gnau7w5-0pwt-MmCOrvsBDrVrXUb7dLEEGlpXtfS-0CPHcnhcbJDjMWAuktV7vcNm2vZDeY_TXEb2d5iHAXd_FOYxcmyarKDMoimXojROUBGxHXtCYxbr8do/s1600/JDT7.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="472" data-original-width="660" height="285" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPBOfiJzQmLXw1c8AZo_3Gnau7w5-0pwt-MmCOrvsBDrVrXUb7dLEEGlpXtfS-0CPHcnhcbJDjMWAuktV7vcNm2vZDeY_TXEb2d5iHAXd_FOYxcmyarKDMoimXojROUBGxHXtCYxbr8do/s400/JDT7.jpg" width="400" /></a></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
<span style="color: #cc0000; font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: x-small;">Poco después de la emisión del último capítulo de <b>Juego de Tronos</b>, comparto en el blog un lúcido análisis sobre el sentido y profundidad de la serie. Su autora, <b>EVA REY UREÑA,</b> aborda con hondura y sensibilidad los temas que, a su parecer, vertebran esta historia, cuyo contenido interpreta a partir de una<b> analogía con nuestra realidad más cercana.</b> Le doy las gracias por permitirme publicar su artículo. Sus augurios se han hecho realidad hoy.</span><br />
<span style="color: #20124d; font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: x-small;"></span><span style="font-size: x-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: x-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;">A pocas horas del estreno del
último capítulo, <b>me produce cierta fascinación</b> (en el sentido de
curiosidad antropológica y social) la <b>enorme polémica que la última
temporada de la serie está suscitando</b>. No dejan de aparecer hordas
de fans protestando por los derroteros que está tomando el
desenlace. No contentos con las quejas, algunos “ofendiditos”
(casi un millón ya) incluso se han lanzado a crear una petición en
Change.org exigiendo a los guionistas que rehagan la octava temporada
(¡qué ridículo y qué patético todo!). Y yo <b>me pregunto si esta
oleada de indignación y decepción no se puede deber a una errónea
interpretación</b> de lo que en realidad es, o debería ser, <i><b>Juego
de Tronos</b></i>. </span></span></span></span>
</span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;">No quisiera pecar de arrogante
dando a entender que mi interpretación es la correcta. Creo que,
precisamente, <b>la diversidad de interpretaciones da la medida de la
grandeza de una creación narrativa</b>. Cuanto más abierta es una
historia, cuantos más ríos de tinta se derramen escribiendo sobre
ella, cuantas más opiniones, hipótesis e interpretaciones, muchas
de ellas opuestas, surjan, más riqueza y complejidad tiene la obra.
Recordemos algunas de las obras maestras de la literatura universal:
¿Cuántas páginas se han escrito acerca del significado del
<i>Quijote</i>,
o de <i>Cien años de
soledad</i>? No
pretendo hacer comparaciones, obviamente; sólo pretendo mostrar que
cuanto más abierta, compleja y rica es una historia, más hipótesis
suscita. </span></span></span></span>
</span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><i><b>Juego de Tronos</b>, </i>tanto
en su versión literaria como en la televisiva, ha desarrollado su
argumento en un período de tiempo ampliamente dilatado. <b>Han sido
diez años de serie</b>. Los libros ni siquiera han terminado. Cuando el
desarrollo de una historia se prolonga tanto en el tiempo, con,
además, largos lapsus de espera entre una temporada y otra, a menudo
olvidamos la manera en que la historia evoluciona. <b>Se nos olvidan los
pasos que se han ido dando hasta llegar al punto en el que estamos
ahora</b>. Yo misma he pecado de eso. Yo misma, cuando vi el episodio
cuarto, y, sobre todo, el quinto de esta última temporada, me quedé
francamente disgustada. Sin embargo, hay una idea que me ha estado
rondando la cabeza casi desde el principio de la serie. Me imagino
que a muchos de vosotros también. <b>Había momentos, episodios,
escenas, diálogos, cuyo significado parecía trascender los hechos
que estábamos contemplando</b>. Desde hace tiempo, intuyo que esta
historia va mucho más allá de lo literal, y que toda ella está
impregnada de un sentido metafórico. Está claro que <i>J<b>uego
de Tronos</b></i><b> pertenece
al género fantástico</b> (dragones, gigantes, brujas, la
ambientación…). Muchos autores antes de George R.R. Martin han
creado universos fantásticos en los que han desarrollado sus
argumentos. Sin embargo, a mi juicio, <b>la grandeza de una obra de
fantasía consiste en ir mucho más allá de esos argumentos</b>.
Consiste en ser capaz de generar un paralelismo entre ese universo
inventado, y el real, de manera que, finalmente, toda la historia sea
una <b>especie de parábola que vincule lo imaginario y lo real</b>
(recordemos, por poner un ejemplo, <i>El
señor de los anillos</i>,
y su parábola sobre el bien el mal). <b>Cuando podemos extrapolar el
mensaje de una historia ficticia y hacerlo universal, aplicable a la
raza humana, entonces esa obra es grande.</b></span></span></span></span></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>Creo que el final de <i>Juego
de Tronos</i> ha
enfadado y decepcionado a muchos</b> porque no entienden, o no quieren
entender, que es una obra realista. Han querido permanecer en ese
universo de fantasía, sin ver los paralelismos que existen con el
mundo real. Han obviado las metáforas, los símbolos, lo oculto pero
patente. Han querido verlo como un mundo de fantasía regido por las
leyes de la fantasía. <b>Yo misma he pecado de ello. Yo misma
transformé a Daenerys en mi heroína particular, hasta que algo me
sacudió y me dije: no, no van por aquí los tiros</b>. Claro que duele
ver desmoronarse ese mundo maravilloso que la tele y los libros han
creado para nosotros. Pero es que <b>tal vez esa serie nos está
transmitiendo un mensaje que no hemos querido ver</b>. Para mí, <b>la clave
para ver y entender la parábola es la propia evolución de la
historia</b>. Como decía antes, el factor temporal influye. La historia
es taaaaan larga… Pasan taaaaantas cosas… Han sido taaaantos
años… Que tal vez se nos olvida cómo empezó.</span></span></span></span></span><br />
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></span>
</span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg-vvKv32QhreD3FUzgj1L7u0hyGva1MrM_Cqrxl2U2fghQtCZe4L5sOyuJjp1dEHuOXi_ddHHcv0LJUxsE-BoaRKU2CLGoLSbym9zhvMbf0MlCCeviVYupx3bB50AraCj9m1yOsgrHyDc/s1600/JDT8.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><img border="0" data-original-height="252" data-original-width="236" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg-vvKv32QhreD3FUzgj1L7u0hyGva1MrM_Cqrxl2U2fghQtCZe4L5sOyuJjp1dEHuOXi_ddHHcv0LJUxsE-BoaRKU2CLGoLSbym9zhvMbf0MlCCeviVYupx3bB50AraCj9m1yOsgrHyDc/s400/JDT8.jpg" width="374" /></span></a></div>
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: large;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;">A</span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;">noche, de pronto, y sin saber
muy bien por qué, <b>sentí la necesidad de volver a ver el primer
capítulo de la serie.</b> Y así lo hice. Y verlo me supuso un shock.
Porque es COMPLETAMENTE DIFERENTE a los capítulos de esta última
temporada. Parece casi como si fueran dos series distintas. <b>¿Cuál
es la esencia de ese cambio?</b> ¿En qué ha consistido la evolución, y
qué significado subyace a dicha evolución?</span></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">La
serie comienza con un <b>nivel de complejidad extraordinario</b>. Eso es lo
que hizo que mucha gente no se enganchara al principio; te pierdes,
con semejante complejidad. Pululan por la historia cientos de
personajes en cientos de escenarios diferentes, múltiples familias
que, además, llevan tras de sí un pasado igualmente complejo que
hemos de ir descubriendo poco a poco. <b>El universo narrativo que se
nos presenta es de una riqueza mayúscula. Dicha riqueza y
complejidad son las constantes de las dos primeras temporadas</b>. Luego
esa enorme diversidad va disminuyendo progresivamente, pero a ritmo
creciente, hasta llegar al penúltimo capítulo.<b> Si, en efecto,
comparamos este último capítulo emitido, con los primeros, resulta
de una simplicidad pasmosa</b>: por el número de personajes
(dramáticamente mermado desde hace tiempo, y cada vez más), por el
número de escenarios, y, lógicamente, por la simplicidad
argumental. Exactamente de eso es de lo que parecen quejarse muchos
fans: la simplicidad argumental y la velocidad a la que todo parece
precipitarse. <b>Pero, ¿acaso no es lógico?</b> A más personajes, tramas
más complejas. A menos personajes, tramas más simples. Cuanto más
complejas son las tramas, más lentamente se desarrollan, puesto que
más son los factores que intervienen en ellas. Sin embargo, cuando
apenas quedan personajes en pie, las tramas deben ir más rápido,
puesto que ya apenas queda complejidad con la que jugar.</span></span></span></span></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<b><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></b></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: small;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: large;"><b>¿Y qué significado tiene
esta creciente pérdida de complejidad? </b>¿Es gratuita?
Definitivamente, NO. La historia de <b>la creciente simplicidad de la
serie es la historia del poder</b> y la concentración de este poder en
cada vez menos manos. </span>
</span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Porque, <b>¿qué nos cuenta
exactamente </b><i><b>Juego de
Tronos</b></i><b>? ¿De qué
va en realidad la historia?</b> Pensemos por un momento que todo este
universo sea, en realidad, un reflejo de la humanidad. De la de
verdad. De la nuestra. Y observemos el punto de partida: la riqueza,
la variedad, la complejidad. <b>El universo de </b><i><b>Juego
de Tronos</b></i><b>, en sus
primeras temporadas, nos muestra un amplísimo abanico de los más
grandes universales del ser humano. TODO está presente en la serie</b>.
Hace poco leí un artículo muy lúcido de un seguidor de la serie y
los libros, que afirmaba que la historia era shakesperaniana. No
puedo estar más de acuerdo. Shakespeare es tan grande porque supo
reflejar en sus obras los grandes universales del ser humano (<i>Romeo
y Julieta</i>, el amor
imposible; <i>Otelo</i>,
los celos; <i>Hamlet</i>,
la duda; etc, etc). Y eso mismo es lo que nos encontramos en <i><b>Juego
de Tronos</b></i>. Sus
(maravillosos) personajes representan las principales pulsiones del
ser humano. Si intentamos ir más allá de la trama, vemos que <b>casi
todos los conflictos que se plantean tienen un trasfondo real, que se
corresponde con los conflictos a los que en distintos momentos se ha
tenido que enfrentar la humanidad</b>. Vemos, por ejemplo, cómo muchos
de los personajes representan las distintas ideologías políticas.
La casa Lannister es un claro símbolo del capitalismo (recordemos
sus alianzas con el Banco de Hierro). <b>Daenerys Targaryan casi parece
símbolo del comunismo a lomos de sus dragones, liberando esclavos y
buscando la justicia social en el mundo</b>. Sólo le falta cantar:
“Arriba los pobres del mundo, en pie los esclavos sin pan…”.
Subtramas como el conflicto de los Reñideros de Mereen plantean
cuestiones a las que siempre nos hemos tenido que enfrentar los seres
humanos: <b>la lucha entre la tradición y el progreso</b> (recuerdo que
cuando vi esa parte, me vino a la cabeza el tema de la tauromaquia:
acabar con una tradición sangrienta y violenta, o mantenerla
simplemente porque es una tradición). La mayoría de los conflictos
políticos que se plantean en la serie, existen o han existido en
algún momento de la historia del ser humano. Tan solo se limita a
disfrazarlo con un bonito traje de fantasía.</span></span></span></span></span><br />
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></span></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjzE9_VNnHNxGqaQoA1Y9SIbmz1NWLc6AF4Srx98zt2dpUgDPuII8VwpF2fXj4E07GCfweuog7BmhIo5NAwtUShEO1zRNiNcYtty4POmeZ796CekjzBuClzKzOVeiJYd0sAnMibufrbBXw/s1600/JDT1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: xx-small;"><img border="0" data-original-height="420" data-original-width="770" height="217" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjzE9_VNnHNxGqaQoA1Y9SIbmz1NWLc6AF4Srx98zt2dpUgDPuII8VwpF2fXj4E07GCfweuog7BmhIo5NAwtUShEO1zRNiNcYtty4POmeZ796CekjzBuClzKzOVeiJYd0sAnMibufrbBXw/s400/JDT1.jpg" width="400" /></span></a></div>
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></span></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: small;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: large;">También <b>desde el principio de
la serie se nos muestran las luces y las sombras de la humanidad,
encarnadas en los diferentes personajes.</b> Vemos la grandeza en <b>Tyrion</b>,
un hombre hecho a sí mismo, encarnación de la justicia en su
sentido más noble, de la INTELIGENCIA, en mayúsculas. Vemos a esa
<b>primera Daenerys</b>, símbolo de la lucha por la igualdad y la libertad,
otro personaje hecho a sí mismo, superando todas las adversidades y
creciendo en carisma. Y vemos a <b>Jon</b>, el enorme y maravilloso Jon, un
personaje que muchos creen que está siendo maltratado por los
guionistas en la última temporada, opinión que trataré de
contraargumentar más adelante. Jon representa, a mi juicio, el más
bello de los ideales: la unión de los seres humanos frente a la
división y la lucha individualista. Es el afán de fraternidad hecha
personaje. <b>Y, junto a las “luces” de </b><i><b>Juego
de Tronos</b></i> (con un
largo etc detrás, pues son muchos otros los personajes que encarnan
las pulsiones más nobles del ser humano) <b>también tenemos, desde el
principio, las sombras: el ansia de poder </b>(Cercei), la crueldad
(Jeoffrey, Ramsey), la manipulación (Lord Baelish), el interés
materialista (Bronn), y otro largo etc. A pesar de encarnar las
diversas fuerzas que mueven a la humanidad, <b>todos los personajes
distan mucho de ser planos, o simples</b>. Prácticamente todos ellos
experimentan importantes evoluciones, igual que nosotros, los
mortales de carne y hueso, porque eso es la vida, cambiar y
evolucionar. </span></span></span></span>
</span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: xx-small;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><b>La historia es compleja y
“real” hasta en el tema de las creencias</b>. Las múltiples
religiones que profesan los personajes, parecen un trasunto de la
diversidad religiosa que ha existido siempre en la historia de la
humanidad.</span></span></span><br />
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: xx-small;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiW58HcY3WS29in4o88VGIF0v_KqG-VWIEOD_7N7i31Z5qDP4406kB0PbxmtIjRhy0SZb007Fy1Nsq4gRV-WcNfNFX2Q8cAxwMzlWOgq-C8kvgvT_ZMivDNKKhwchiM_6LwFgbB62HzSXI/s1600/JDT2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: xx-small;"><img border="0" data-original-height="697" data-original-width="1214" height="228" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiW58HcY3WS29in4o88VGIF0v_KqG-VWIEOD_7N7i31Z5qDP4406kB0PbxmtIjRhy0SZb007Fy1Nsq4gRV-WcNfNFX2Q8cAxwMzlWOgq-C8kvgvT_ZMivDNKKhwchiM_6LwFgbB62HzSXI/s400/JDT2.jpg" width="400" /></span></a></div>
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br />
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Si todo esto es así,
entonces, ¿a qué se debe la progresiva pérdida de complejidad de
la trama? Más allá de lo evidente –mueren muchísimos personajes,
desaparecen familias enteras-, y siguiendo con la parábola, <b>¿no se
trata del reflejo del cada vez mayor aumento de entropía al que se
enfrenta la humanidad?</b> Veo esa pérdida de riqueza como el reflejo de
dos cosas: en primer lugar, como el comienzo de la auto-aniquilación
de la humanidad , y, en segundo lugar, como la pérdida de diversidad
y riqueza que conlleva esta brutal globalización que cada vez tiende
más al pensamiento único. Al igual que en la serie, este fenómeno
tiene lugar cuando se da una enorme concentración de poder (mucho,
muchísimo poder), en muy pocas manos. El capitalismo salvaje al que
nos enfrentamos va por ese camino. Lo estamos viendo de forma cada
vez más patente. La riqueza (y con ella el poder) se va concentrando
cada vez en menos personas, y el equilibrio se rompe. <b>En </b><i><b>Juego
de Tronos</b></i><b>, las
distintas familias de nobles representaban los núcleos de poder. </b>Un
poder en permanente lucha, como siempre ha sucedido en la humanidad,
pero en ese extraño equilibrio que proporciona la complejidad. Es la
ambivalencia, la armonía entre opuestos de la que nos habla el
yin-yang. Sin embargo, a medida que las familias van cayendo,
extinguiéndose para siempre en muchos casos (los Frey, los Bolton,
los Mormont…), el poder se va concentrando cada vez en menos manos.
Ya ni siquiera lo encarnan familias, lo encarnan tan solo personas.
La cantidad de poder es inversamente proporcional a las manos que lo
ostentan. <b>Al final, sólo dos personajes de la serie concentran en sí
mismas todo el poder: Cercei Lannister y Daenerys Targaryen</b>. Lo que
venga después sólo puede resumirse en una palabra: DESASTRE. El
espectador no se ve sorprendido por el ansia de poder y de
destrucción de Cercei, porque siempre ha sido uno de los “malos”.
Pero sí se ha visto defraudado por las consecuencias que este poder
ha tenido en Dany. <b>¿Acaso somos tan ingenuos de pensar que tantísimo
poder es compatible con la bondad? ¿Con la cordura, siquiera?</b> Nos
dicen algunos que Daenerys ha acabado así por sus genes, por ser una
Targaryen, por su padre, el Rey Loco. ¡Qué explicación tan
simplista! ¿Qué figura histórica de la humanidad ha alcanzado
mucho poder y no ha caído en la barbarie, en la destrucción? Tal
vez pensar en Hitler no sea lo más acorde a la ideología de Dany,
pero, como leí en otro artículo precioso, nuestra querida Khaleesi
es esa heroína comunista que, de tanto poder como adquiere, acaba
cometiendo las atrocidades que cometió Stalin. <b>El poder corrompe.
Eso no es ninguna novedad. ¿por qué entonces indigna tanto la
transformación de Daenerys? ¿Tal vez porque nos molesta el realismo
de la serie? </b>¿Quizás porque preferíamos seguir en ese mundo de
dragones, brujas y gigantes, donde creíamos que a nuestros héroes o
heroínas no les afectaría el poder? Los cuentos de hadas son muy
bonitos. Pero <i><b>Juego
de Tronos</b></i><b> no es un
cuento de hadas </b>(afortunadamente). Insisto: la historia de la la
creciente simplicidad de la serie es la historia del poder y la
concentración de este poder en cada vez menos manos. </span></span></span></span></span><br />
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><br /></span></span></span></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<img border="0" data-original-height="360" data-original-width="640" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiGcmE9QHswfGo60MlNAoEZvUWBbBwaILyrj6SuEdke0xmTHDrnNnlcnFWog3YdTz33JO8_DjPMtvo_sAIPYrTjymulLeL2fuWhZ4pqnbGlfPm3L72ALUvzbJXqa4VxZ19ZWLOgfB6LWGM/s400/JDT6.jpg" width="400" /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; text-indent: 0cm;">Siguiendo con esta línea de
interpretación, la última temporada de la serie no puede ser más
coherente. En ella se nos muestran las consecuencias de la
acumulación de poder en muy pocas manos: el desastre. </span><b style="font-family: times, "times new roman", serif; text-indent: 0cm;">Nos
encontramos en la octava temporada con las dos mayores amenazas a las
que se enfrenta la humanidad:</b><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; text-indent: 0cm;"> una solventada gracias a ese enorme
héroe que es Jon Nieve, y la otra no. Me refiero a la </span><b style="font-family: times, "times new roman", serif; text-indent: 0cm;">Batalla de
Invernalia contra el Rey de la Noche, y la destrucción de Desembarco
del Rey</b><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; text-indent: 0cm;">. ¿Cuáles son esas dos amenazas? Analicemos estos dos
episodios.</span></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif; text-indent: 0cm;">Para interpretar el episodio
de la Batalla de Invernalia, no podemos olvidar quién es el <b>Rey de
la Noche</b> y qué representa. Recordemos su origen: hace muchísimos
años, los Primeros Hombres, en sus ansias de poder, comenzaron a
destruir los bosques (¿os suena?: la destrucción de nuestro planeta
por intereses capitalistas). Los <b>Hijos del Bosque</b>, horrorizados ante
la amenaza que esto suponía para su hogar, crearon al Rey de la
Noche, que, a medida que avanza la historia, irá cobrando mayor
relevancia, creando un enorme ejército para acabar con el reino de
los hombres. ¿¿Quién dice que el Rey de la Noche es malo?? </span><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif; text-indent: 0cm;">Representa la amenaza del propio planeta rebelándose contra la
destrucción y la ambición humanas. ¡<b>Qué lúcidos los discursos de
Jon Nieve cuando intenta convencer a todos para que olviden sus
diferencias y se unan en esta misión,</b> porque lo que está en juego
es la <b>SUPERVIVENCIA</b> de los humanos! ¡Qué razón tenía al decir:
olvidaos de vuestras estúpidas luchas de poder, individualistas y
egoístas! <b>¿Qué más da quién gobierne, si no habrá reino sobre
el que gobernar?</b> Me recuerda tanto a nuestros políticos actuales.
Los vemos “pegarse” por cuestiones como el nacionalismo catalán,
por muros, por petróleo, por territorios más o menos polémicos,
por impuestos… <b>Cuando todo eso no servirá de nada si no se
resuelve el mayor de los problemas: seguir teniendo un planeta en el
cual vivir</b>. Puro sentido común, Jon Nieve.</span><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span></span><br />
<span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif; text-indent: 0cm;"><br /></span></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; text-indent: 0cm;">Por eso, <b>ese tercer episodio
de la última temporada me resultó tremendamente sobrecogedor</b>. ¡Y
qué bien hecho estaba, para transmitir precisamente eso, ese terror
absoluto que provoca la idea del apocalipsis! Maravilloso el equipo
técnico, Y </span><b style="font-family: times, "times new roman", serif; text-indent: 0cm;">Ramin Djawadi</b><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; text-indent: 0cm;">, por esa música espeluznante. Tampoco
entiendo las críticas a este episodio: ¿Que estaba oscuro? Pues
claro. No iba a suceder en un día luminoso. Para transmitir toda esa
desolación, ese terror absoluto, esa idea del final del mundo, ese
horror casi innombrable, era necesaria la oscuridad. El caos y la
confusión de que se quejaron algunos… </span><b style="font-family: times, "times new roman", serif; text-indent: 0cm;">Es el caos y confusión que
experimentaban los que estaban allí, luchando cuerpo a cuerpo con la
muerte, con el final de todo. Gracias por hacérnoslo sentir a los
espectadores también</b><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; text-indent: 0cm;">. El colofón fue esa melodía de Ramin Djawadi
durante los últimos quince minutos del episodio, en los que toda la
esperanza parecía perdida, en que parecía que no habría salvación
para los humanos. Estoy segura: la desesperanza, el horror, la
desolación, el fin del mundo…suenan a la canción de Ramin
Djawadi.</span><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Este tercer episodio
representa, para mí, el último resquicio de grandeza humana. En la
serie, claro, pero también en la vida real. <b>Porque nunca los seres
humanos son tan grandes como cuando se unen por una causa mayor,
cuando olvidan sus diferencias y caminan todos en una misma
dirección.</b> Fue el último capítulo heroico. Y, aunque para muchos
Jon Nieve no fue el héroe de este capítulo, para mí sí lo fue. Es
cierto, <b>Arya</b> mató al Rey de la Noche. Pero el que hizo posible esta
unión fraternal entre tanta gente, el que les convenció a todos
para luchar juntos, el que unió en vez de separar, fue él. Y le
costó muchísimo. Por mucho que se diga, para mí, <b>Jon Nieve siempre
será el gran héroe de </b><i><b>Juego
de Tronos</b></i><b>, por
encarnar el lado más noble del ser humano</b>.</span></span></span></span></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEirBIaijuQBqFZNbQKPMDc-9cPIUWuWJCv7-rvYlpgpzwv-hkWyjS6l1MkFcVy4-blqKtSqCoZx7o1rRXZdyxzPKk66KxPG0mrpsRlaGDg1222xnVNwW3LUzxMyJpxbBRf-ncFUEcA4Lxo/s1600/JDT5.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: xx-small;"><img border="0" data-original-height="483" data-original-width="644" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEirBIaijuQBqFZNbQKPMDc-9cPIUWuWJCv7-rvYlpgpzwv-hkWyjS6l1MkFcVy4-blqKtSqCoZx7o1rRXZdyxzPKk66KxPG0mrpsRlaGDg1222xnVNwW3LUzxMyJpxbBRf-ncFUEcA4Lxo/s400/JDT5.jpg" width="400" /></span></a></div>
<span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; text-indent: 0cm;"><br /></span>
<span style="font-size: medium;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; text-indent: 0cm;"><b>La segunda gran amenaza para
el ser humano y su historia se ve reflejada en el polémico quinto
capítulo</b> de esta última temporada, en el que hemos asistido a la
<b>destrucción de Desembarco del Rey por una desquiciada Daenerys
Targaryen</b>. Muchos han criticado la evolución del este personaje
(tema del que ya he hablado). Otros han criticado lo abrupto de esta
evolución, lo rápido que ella cambia (esta última crítica me
parece más lógica). Sin embargo, entra dentro de las leyes de la
causalidad este estallido de violencia y crueldad de la Madre de
Dragones. <b>Se trata de un BUCLE DE AMPLIFICACIÓN, una de las
explicaciones más racionales de la causalidad.</b> En determinadas
circunstancias, el efecto provocado por una causa X es mayor de lo
esperado. Esto provoca que el siguiente efecto sea mayor, y el
siguiente mayor, y así sucesivamente, de manera exponencial. De
manera que, lo que en circunstancias normales llevaría siglos
producirse, puede acelerarse dramáticamente y provocar una última
consecuencia tan imprevisible como destructora y ya inevitable (esto
es, por cierto, de lo que nos están avisando los científicos en
relación con el cambio climático: otro bucle de amplificación, o
causalidad con crecimiento exponencial). <b>La evolución de Daenerys
fue lenta al principio. Pero el poder cada vez mayor que va
adquiriendo</b> (gracias a los Dothrakis, los Inmaculados y, sobre todo,
sus dragones) va actuando, dentro del enlace causativo, como <b>elemento
provocador de un bucle de amplificación, de manera que las
consecuencias finales se “descontrolan”</b>. No olvidemos, además,
que existe una causa previa, sí, pero también unas causas
desencadenantes que contribuyen a precipitar unas consecuencias que
estaban ya ahí en estado latente: la muerte de Jorah, Missandei y
dos de sus dragones, el alejamiento afectivo de Jon, la creciente
soledad y aislamiento… Si no se tiene esto en cuenta, el
desconcierto es comprensible. O, a veces, incluso teniéndolo en
cuenta, no nos gusta. Claro que no nos gusta. Pero reconozcámoslo:
coherente, es. Aunque duela salir abruptamente de nuestro cuento de
hadas. Aunque en nuestros corazones esperábamos un final feliz. Qué
queréis que os diga: <b>yo dudo mucho que haya un final feliz para los
humanos, y eso es lo que creo que </b></span><b style="font-family: times, "times new roman", serif; text-indent: 0cm;"><i>Juego
de Tronos</i> nos
quiere decir.</b></span><br />
<span style="font-size: medium;"><b style="font-family: times, "times new roman", serif; text-indent: 0cm;"><br /></b></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEimDk88hwk0leDo2CqjwecUzRTn301twlM1HBY-CUntpORFHSD2o3xWZyeY4a8U_PaKJsCgFgoH0_Z9pZSXgPyBIThuWb-8upKFk9FXlQtMfbPUAAwPeeiYX-D9gy4SWxWlLNYe80CSwd4/s1600/IMG-20190521-WA0058.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="374" data-original-width="660" height="226" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEimDk88hwk0leDo2CqjwecUzRTn301twlM1HBY-CUntpORFHSD2o3xWZyeY4a8U_PaKJsCgFgoH0_Z9pZSXgPyBIThuWb-8upKFk9FXlQtMfbPUAAwPeeiYX-D9gy4SWxWlLNYe80CSwd4/s400/IMG-20190521-WA0058.jpg" width="400" /></a></div>
<span style="font-size: medium;"><b style="font-family: times, "times new roman", serif; text-indent: 0cm;"><br /></b></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Pero, a lo que iba: <b>el
episodio de la destrucción de Desembarco del Rey representa, a mi
juicio, la segunda de las grandes amenazas para la humanidad: una
guerra letal que acabe con todo</b>. Creo que, además, la intención de
este capítulo va en consonancia con esta interpretación: se <b>trata
de mostrarnos la crudeza de la guerra</b>. El episodio no escatima en
detalles del horror: niños mutilados, familias rotas, ciudades
destruidas. Eso provoca el poder desmedido. <b>Nuestra querida Khaleesi
es ahora una tirana borracha de poder. Su maravilloso dragón ya no
es un elemento de cuento de hadas, sino un arma de destrucción
masiva,</b> equivalente a la peor de las bombas nucleares. No hay más
que ver los efectos que nos muestran con todo lujo de detalles en el
capítulo. Igualito que en la vida real. Como me dijo mi hermano,
<b>aquí ya no hay ni héroes ni heroísmo de ningún tipo. Sólo guerra
y destrucción</b>. Claro que no nos gusta. <b>¿Cómo nos va a gustar?
Pero, insisto: </b><b><i>Juego
de Tronos</i> va mucho
más allá de la ficción. Es una parábola de la naturaleza humana. </b></span></span></span></span></span><br />
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><b></b><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></span></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjyXYxlViCuMpWb42WR3vmJaQFYB0tuxuctoaZWC2oEMZia0yhzvrY2vqn6lkAUKqSGqvMwBrbcRV8XUa_kR1IhBznQR0mohqXnp5K1mRFrR9qGsuFCgS_PUxsY2gj0u3iuUo3tDbnlaSY/s1600/JDT4.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: xx-small;"><img border="0" data-original-height="900" data-original-width="1600" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjyXYxlViCuMpWb42WR3vmJaQFYB0tuxuctoaZWC2oEMZia0yhzvrY2vqn6lkAUKqSGqvMwBrbcRV8XUa_kR1IhBznQR0mohqXnp5K1mRFrR9qGsuFCgS_PUxsY2gj0u3iuUo3tDbnlaSY/s400/JDT4.jpg" width="400" /></span></a></div>
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><b><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><br /></b></span></span></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: medium;"><b>No sé cómo acabará la
serie. </b>No sé qué veremos mañana en el último capítulo. Mi
coherencia me pide la destrucción total, que no quede ni un
personaje vivo. <b>Mi corazón me pide que Jon Nieve ocupe el Trono de
Hierro, aunque lo veo complicado</b>. ÉL NO QUIERE. Y he aquí otra de
las grandes lecciones de esta serie, que viene de manos de un
personaje recientemente desaparecido: <b>Lord Varys</b>. El eunuco es uno de
los personajes que más antipatías ha despertado a los fans, sobre
todo en esta última temporada, en cuanto empezó a dar muestras de
su deslealtad y traición a Daenerys. Pero, pensémoslo. Bajo el
prisma de esta interpretación, Daenerys merecía ser cuestionada.
Varys, a pesar de su apariencia desagradable, de sus intrigas y
manipulaciones, es, en realidad, un personaje enormemente coherente
y, a mi juicio, con muchísima razón. Se le ha tachado de traidor y
chaquetero. Pero, para mí, <b>Varys representa la voz del pueblo y el
espíritu crítico. En la séptima temporada, le decía a Danaerys:
“La incompetencia no debe recompensarse con lealtad ciega </b>(…). Mi
verdadera lealtad no es para un rey o una reina, sino para el
pueblo”. Sabias palabras, a mi juicio. Palabras que, en su
coherencia, subyacen a su decisión de traicionar a Daenerys. Porque
ella ya no es lo que prometía ser. Porque se ha corrompido. Y Varys
sabe que esa lealtad ciega es estúpida. El poder corrompe, por eso
los reyes acaban siendo malos reyes cuando alcanzan demasiado poder.
Por eso Varys ha servido a tantos. Por eso ha sido un “chaquetero”.
Y por eso en la vida real votamos cada cuatro años. Porque
entendemos que el poder debe alternarse o, al menos, ser sometido a
la voluntad del pueblo cada cierto tiempo, ya que es algo que
corrompe. Otra cosa es que hoy en día todo esto se haya convertido
en una pantomima pseudo-democrática. Pero la idea es esa. Varys ha
sido uno de los personajes más demócratas de la serie. Lamento su
ejecución. </span></div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: xx-small;"><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiqbSMA5e9cUsxmvCpS5DBjlBaP4wF1JaUrveiFcP11VTJDz_eIy41Nuksp7PGaBP8Eyfi9ROChZaAmObcBVbJ1sALVi7Wkg_lAHCbwdY2HS6Uk0qLDC8uOgYXnTp0ie5O6n9-TNZ8pNkQ/s1600/Foto+de+Emilia.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: xx-small;"><img border="0" data-original-height="561" data-original-width="996" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiqbSMA5e9cUsxmvCpS5DBjlBaP4wF1JaUrveiFcP11VTJDz_eIy41Nuksp7PGaBP8Eyfi9ROChZaAmObcBVbJ1sALVi7Wkg_lAHCbwdY2HS6Uk0qLDC8uOgYXnTp0ie5O6n9-TNZ8pNkQ/s400/Foto+de+Emilia.jpg" width="400" /></span></a></div>
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: xx-small;"><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: medium;">Sin embargo, antes de ser
ejecutado por Daenerys, <b>Varys muestra su deseo de que Jon ocupe el
Trono. Tyrion le recuerda que Jon no quiere.</b> La respuesta de Varys a
esta observación me parece enormemente lúcida: “¿Habéis pensado
que el mejor gobernante quizás sea el que no quiere gobernar?”
¡Pedazo de frase! En perfecta consonancia con lo que se viene
diciendo hasta ahora. Una frase que resume a la perfección lo que
sucede con las ansias de poder. Cualquiera con ansias de poder se
acaba corrompiendo y termina siendo un tirano, por eso, tal vez
deberían gobernar aquellos que no quieren “gobernar”,
entendiendo por gobernar la total falta de ambición de poder. De
hecho, esta ha sido la constante de Jon Nieve. Todos los cargos que
ha ido consiguiendo: Comandante de la Guardia de la Noche, Guardián
del Norte, Rey en el Norte… No los ha escogido él, él no los
quería. Fueron los demás los que le pusieron ahí, y tal vez por
eso lo hizo tan bien. Consiguió sus apoyos, no por ser quien era (un
simple bastardo), sino por lo que hizo. Rompió las rígidas normas
de Poniente sólo gracias a su valía. <b>Muchos han criticado el rol de
Jon esta última temporada. Que era anodino, insulso, que no
reaccionaba, que no hacía nada, que le faltaba heroísmo, que estaba
como paralizado</b>. Es cierto. Pero, ¿qué otra actitud cabe ante
semejante desenlace? Jon puede mostrar su heroicidad es un contexto
en el que aún sea posible esa heroicidad. A partir del capítulo
tercero, la heroicidad desaparece de la serie. Sólo queda la
corrupción. Y en un mundo tan corrupto, los nobles de corazón sólo
pueden asistir con dolor y perplejidad al mal ajeno. Por otra parte,
al haberse simplificado la trama por las razones antes comentadas,
las posibilidades de intervención disminuyen. <b>Jon fue heroico en un
mundo complejo en el que muchas de las tramas, con muchos de sus
personajes, favorecían su heroicidad.</b> Ahora, las tramas se han
simplificado, quedando sólo una: la de Cercei y Daenerys, las dos
representantes del ansia desmesurada de poder. Ante semejante
desastre, Jon no quiere, ni puede, ni debe intervenir. Es impotente
ante semejante maldad. Porque, cuando se sobrepasan todos los límites
de la ética, la única manera de enfrentarse a mucha maldad es con
aún más maldad. Jon no va a pasar por ahí. Y esto sólo habla a su
favor. Algo parecido sucede con <b>el otro personaje que aún encarna el
lado bueno del ser humano: Tyrion</b>. <b>Los dos actúan y reaccionan
igual: con impotencia y frustración.</b> En este nuevo modelo del mundo
que queda tras esa acumulación de poder en tan pocas manos, ese
poder es tan grande, que Tyrion y Jon nada pueden hacer. Ya no hay
subtramas ni contra-tramas en las que puedan actuar. Nada puede
brillar ahí donde la entropía ha triunfado.</span><br />
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: xx-small;"><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihWw0t-BEF2MMZB76UITXqsuc8nOZI311TYoq9qpdIVbaWUuXqtL6TcbUqDIBJ5OIKNPFB8g8SdlpOtOhZnZEJdcmZGP8OqalPf5f_Of2SBJCja-gcFC3bOmd2FASdJAD_FBhKpIXGPJ8/s1600/JDT3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif; font-size: xx-small;"><img border="0" data-original-height="349" data-original-width="620" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihWw0t-BEF2MMZB76UITXqsuc8nOZI311TYoq9qpdIVbaWUuXqtL6TcbUqDIBJ5OIKNPFB8g8SdlpOtOhZnZEJdcmZGP8OqalPf5f_Of2SBJCja-gcFC3bOmd2FASdJAD_FBhKpIXGPJ8/s400/JDT3.jpg" width="400" /></span></a></div>
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: xx-small;"><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-size: xx-small;"></span><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"></span><br /></span></div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
</div>
<div align="justify" style="background: transparent; line-height: 150%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; text-indent: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-family: "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: xx-small;"><span style="font-family: "georgia" , "times new roman" , serif;"><span style="font-family: "times" , "times new roman" , serif; font-size: large;">Por eso, <b>barajo dos posibles
finales para la serie: el peor pero más realista: la destrucción
total, la aniquilación de todos los personajes; y un final feliz: la
subida de Jon al Trono, con Tyrion como su mano</b>, <b>que representaría,
tal vez, un resquicio de esperanza para esta humanidad enferma</b>,
corrupta y ambiciosa que tan bien ha sabido retratar<i>
Juego de Tronos</i>. O
tal vez, no sé, mañana la serie me sorprenda con un nuevo giro
inesperado, como ha pasado tantas otras veces a lo largo de todo este
tiempo. En realidad, <b>lo único que tengo que lamentar es que se
acabe.</b> Y no sólo por los momentos gloriosos que me ha hecho vivir, a
mí y a tanta gente, sino, <b>sobre todo, y más importante, por lo
muchísimo que he aprendido de ella sobre la terrible naturaleza
humana y su triste historia. </b></span></span></span></span></span>
</div>
<div align="justify" style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm;">
<b></b><i></i><u></u><sub></sub><sup></sup><strike></strike></div>
Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-75523209948418461242019-03-27T12:56:00.001-07:002019-03-27T13:25:42.767-07:00Llegará la mañana<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnHCDfpFw59_Gl1-tBCgUCOVNkVWl2xwTOzUHDTasIrty2yBpMmNoL0_Gx8kIjSazSJiRRZd-a8NGLFCBTrARsMmaodnsYOUg_hKUwzY480MskUWnl-CnAGrjaBdJLKyAeJ2qt921vREM/s1600/conscious_universe210_01.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="297" data-original-width="450" height="211" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnHCDfpFw59_Gl1-tBCgUCOVNkVWl2xwTOzUHDTasIrty2yBpMmNoL0_Gx8kIjSazSJiRRZd-a8NGLFCBTrARsMmaodnsYOUg_hKUwzY480MskUWnl-CnAGrjaBdJLKyAeJ2qt921vREM/s320/conscious_universe210_01.jpg" width="320" /></a></div>
<span style="font-family: sans-serif; font-size: medium;"><br /></span>
<span style="font-family: sans-serif; font-size: medium;">Llegará la mañana de tu mano en mi hombro, de los temerosos dedos ribeteándome el alma, del fundido en tu boca sin la culpa en los labios, de tu aliento en el cuello respirando mi calma.</span><br />
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: large;">
<br />
<div dir="auto">
Llegarán tus pestañas al cruce estriado y dormido que cobija mi ombligo, buscando lugar para el sueño, la sombra almendrada donde descansar la mirada.</div>
<div dir="auto">
<br /></div>
<div dir="auto">
Cruzará la noche la verdad sin vestido<br />
a posar en tu oído la traviesa palabra, </div>
<div dir="auto">
para que vengas conmigo </div>
<div dir="auto">
a saltar sin miedo<br />
ni al inmenso vacío</div>
<div dir="auto">
ni a la desnudez del alba.</div>
</div>
Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-88422220515403572712019-03-27T04:42:00.000-07:002019-03-27T06:57:05.053-07:00Las "Sinsombrero", en el IES Valmayor<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg_QGjXBbA8fs2h4eoke8eYWKp4h23LajrTrGhNcE0HrDz95BHY95PV6L-e4rXAGui6Ms1D0SWcJRtjEJxrNKPRwiZXW3LYBEvgvW01QevJchW50zttagk0775X_6P7LQYNa4IfRw_Wj2s/s1600/Sinsombrero-Manuel-Jimenez-Serrana-Torres_EDIIMA20160226_0685_18.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="404" data-original-width="643" height="251" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg_QGjXBbA8fs2h4eoke8eYWKp4h23LajrTrGhNcE0HrDz95BHY95PV6L-e4rXAGui6Ms1D0SWcJRtjEJxrNKPRwiZXW3LYBEvgvW01QevJchW50zttagk0775X_6P7LQYNa4IfRw_Wj2s/s400/Sinsombrero-Manuel-Jimenez-Serrana-Torres_EDIIMA20160226_0685_18.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #38761d;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #660000;">En el <b>IES Valmayor de Valdemorillo (Madrid)</b> hemos arrancado nuestro proyecto de investigación y difusión de la figura de <b>"Las Sinsombrero"</b>, las mujeres de la <b>edad de plata</b> silenciadas por la historia y rescatadas gracias a los documentales de <b>Tania Balló</b> para RTVE, <b>"Las Sinsombrero. Imprescindibles"</b> (2014) y <b>"Las Sinsombrero 2. Ocultas e impecables"</b> (2018).</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #660000;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #660000;">Nuestros <b>alumnos de 4° de ESO</b> están abriendo perfiles en <b><u>Twitter, Instagram y Facebook</u></b> con los nombres de algunas de estas "Sinsombrero". La intención es que indaguen en sus vidas y sus obras para ir publicando en las redes sociales los datos biográficos más relevantes, fotografías, enlaces informativos, poemas, cuadros, <b>"como si fueran ellas"</b>... <b>Maruja Mallo, Concha Méndez, María Teresa León, Ernestina de Champourcín, Rosa Chacel, Marga Gil, entre otras.</b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #660000;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #660000;">Las profesoras del <b>departamento de Lengua y Literatura</b>, entre las que me encuentro, os invitamos a visitar los perfiles de las #Sinsombrero. <span style="font-size: large;"><b>¡Seguidlas!</b></span> Os sorprenderá saber cuántas mujeres contribuyeron a enriquecer la cultura española de principios del siglo XX desde distintas disciplinas artísticas: literatura, pintura, escultura, teatro...</span><br />
<span style="color: #660000;"><br /></span>
<span style="color: #660000;"><b>Algunos tweets han alcanzado más de 1.000 "me gusta"</b> y cientos de "retweets". <b>En Instagram y Facebook está creciendo también el número de seguidores</b>... </span><br />
<span style="color: #660000;"><br /></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjoh9Ouinb0IJsJhPDnky5YLsGWqW1clnSEfPz29PNhR4t8iNMYIRu9bkn5JfCeBWlcDKfYuloS9NWcHyjJn2dzAVYaRNTvIIJBXPi7H07I_51W_ijNujo89wNjprcLKPQ3XtEJFYKlv-g/s1600/IMG_20190327_144420.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1600" data-original-width="891" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjoh9Ouinb0IJsJhPDnky5YLsGWqW1clnSEfPz29PNhR4t8iNMYIRu9bkn5JfCeBWlcDKfYuloS9NWcHyjJn2dzAVYaRNTvIIJBXPi7H07I_51W_ijNujo89wNjprcLKPQ3XtEJFYKlv-g/s400/IMG_20190327_144420.jpg" width="222" /></a></div>
<span style="color: #660000;"><br /></span>
<span style="color: #0c343d; font-size: large;"><b>¡Las #Simsombrero son unas #Influencers!</b></span><br />
<span style="color: #0c343d; font-size: large;"><b><br /></b></span>
<span style="color: #0c343d;"><b>Estos son los enlaces de las cuentas creadas, con fines educativos, por las profesoras de Lengua del IES Valmayor. En ellos encontraréis los perfiles de las "Sinsombrero" que nuestros alumnos han creado:</b></span><br />
<span style="color: #0c343d;"><b><br /></b></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<a href="https://twitter.com/Sinsombrero_vmy/status/1106231115134783490?s=19" target="_blank">https://twitter.com/Sinsombrero_vmy/status/1106231115134783490?s=19</a></div>
<div style="text-align: justify;">
<br />
<a href="https://www.instagram.com/sinsombrero_vmy/p/BvYv8nSnAVX/?utm_source=ig_share_sheet&igshid=110ugdajx8pby" target="_blank">https://www.instagram.com/sinsombrero_vmy/p/BvYv8nSnAVX/?utm_source=ig_share_sheet&igshid=110ugdajx8pby</a><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiNLgywLIgO7eQWXRKI9QRTDLjpRKxO67nIbj4Tz3I-L_qkqE-fB7AHWMhiqZpQJMMoZvyiCP9diCInXtYoFj-FUKm8wQBc2pwWsRxhAwAYweeWG_GMGVkVAZl3WLhqnah9NzWGXP4cBKU/s1600/IMG_20190327_144605.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1600" data-original-width="829" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiNLgywLIgO7eQWXRKI9QRTDLjpRKxO67nIbj4Tz3I-L_qkqE-fB7AHWMhiqZpQJMMoZvyiCP9diCInXtYoFj-FUKm8wQBc2pwWsRxhAwAYweeWG_GMGVkVAZl3WLhqnah9NzWGXP4cBKU/s400/IMG_20190327_144605.jpg" width="206" /></a></div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<a href="https://www.facebook.com/eva.reyvmy" target="_blank">https://www.facebook.com/eva.reyvmy</a><br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEia5Uc9jGKAT7Prr1wQ-5IAWyQ8OEES3jLUmuJm8VkfiQARQolWC6I0ai9NI_GDIhhcx9cprFguxDbcd4SaZRu0FurUk4S-trM8TqxQWJj5DwkLEgcXMKvjG3r3NBDHwl4hWq-x5YLXTyo/s1600/IMG_20190327_144717.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1600" data-original-width="861" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEia5Uc9jGKAT7Prr1wQ-5IAWyQ8OEES3jLUmuJm8VkfiQARQolWC6I0ai9NI_GDIhhcx9cprFguxDbcd4SaZRu0FurUk4S-trM8TqxQWJj5DwkLEgcXMKvjG3r3NBDHwl4hWq-x5YLXTyo/s400/IMG_20190327_144717.jpg" width="215" /></a></div>
<br />
También podéis ver los documentales de RTVE, "Las Sinsombrero", primera y segunda parte:<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<iframe allowfullscreen="" class="YOUTUBE-iframe-video" data-thumbnail-src="https://i.ytimg.com/vi/DXwgReVkrtQ/0.jpg" frameborder="0" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/DXwgReVkrtQ?feature=player_embedded" width="320"></iframe></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<iframe allowfullscreen="" class="YOUTUBE-iframe-video" data-thumbnail-src="https://i.ytimg.com/vi/KYKYe_AoTwM/0.jpg" frameborder="0" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/KYKYe_AoTwM?feature=player_embedded" width="320"></iframe><br />
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-79625750448881039682019-01-26T04:10:00.004-08:002019-01-26T15:10:19.223-08:00Sangre de Divya<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhb0YZhphdmjur1eoRi22qs_CRIJyCfjRaF7w0Vuu1JrcTMbKUqaZG5XKALeoEdH3vmD-VG1hJcX60U-Zg3MBEib997DU7Bw9qu_9c0IPHcHcyIqYbSH0fJqTL0IZsWPEiyN6eQlXbzxPU/s1600/Nina+India.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="800" data-original-width="588" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhb0YZhphdmjur1eoRi22qs_CRIJyCfjRaF7w0Vuu1JrcTMbKUqaZG5XKALeoEdH3vmD-VG1hJcX60U-Zg3MBEib997DU7Bw9qu_9c0IPHcHcyIqYbSH0fJqTL0IZsWPEiyN6eQlXbzxPU/s320/Nina+India.jpg" width="235" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">Me trae la brisa del poniente el
eco vibrante del cobre, que viene de lejos, el golpe de la maza con la que se
llama a las gentes a la oración. Dieciocho colinas rodean el templo, aunque desde
cualquiera de sus cumbres puede uno sentir la caricia del salitre. Los dioses,
en su sabiduría, buscaron su descanso en un lugar donde la naturaleza, rica y
diversa, se hace única, donde cielo, tierra y mar, densos bosques y enormes
praderas se dan la mano. Así es esta región hindú de Kerala en la que nacieron
mis ancestros y yo misma vi la luz primera.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">Venidos de todos los rincones de
nuestra vasta tierra, adoran los hombres al dios <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">Ayyappan</b>. Deben adentrarse entre los árboles que escalan la montaña
en dirección al templo, guiados por su fe y el sobrio tañido con que se adora
desde lo alto a la divinidad. <span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;">Quedan las puertas
abiertas al mundo durante los días del <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">Mandalapooja</b>, justo antes de las nieves, </span><span style="background: white; color: #222222; line-height: 115%;"> </span><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;">para <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">Makaravilakku</b></span><span style="background: white; color: #222222; line-height: 115%;">, </span>ya en el primer mes del año, y durante el <b>Vishu</b>, con
la flor de abril.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">Recuerdo aquella primavera, la de
mi primera visita, de la mano de mi padre cuando a él ya le resultaba demasiado
cansado llevarme sobre sus espaldas. Lucíamos en el cuello una guirnalda hecha
con semillas de <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">tulasi</b>, pues ese era
el primer gesto con que daba comienzo el <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">vatahm</b>,
la penitencia que mis mayores iniciaban 41 días antes de emprender la marcha. Debían
entonces vestir de negro o azul, tanto al orar como en sus casas, realizar baños
dos veces al día, ingerir solo alimentos vegetales y no afear en ningún caso su
lenguaje ni conducta. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjsPSA5UN00BRdeWol2H99mM-mELsHVTRlTom5bjpTbG67naGNlrNSs7dAQC9cMeeEPO3OCGRnrJMOPsUXPDE10moeilGe-crtiefpDqQXBxIl7mpW_ic4pCXireL6uCcM5dElimWLmNxY/s1600/ayyappan-08-710393.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="660" data-original-width="880" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjsPSA5UN00BRdeWol2H99mM-mELsHVTRlTom5bjpTbG67naGNlrNSs7dAQC9cMeeEPO3OCGRnrJMOPsUXPDE10moeilGe-crtiefpDqQXBxIl7mpW_ic4pCXireL6uCcM5dElimWLmNxY/s400/ayyappan-08-710393.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">Los hombres purificaban de esta
manera sus cuerpos antes de llegar a <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">Sabarimala</b>.
Mientras avanzábamos, mi padre me contaba que allí, en aquel templo, fue donde
el Dios hindú Ayyappan meditó después de matar al poderoso demonio <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">Mahishi</b>. La gente sale de <b>Erumely</b> hacia
el río Azhutha; cruzando las montañas viene el cruce sagrado de Karimala y,
finalmente, hay que atravesar el río <span style="color: windowtext; text-decoration: none; text-underline: none;"><b>Pamba</b></span>.
Salidos de las aguas, apenas unos kilómetros de sendero separan a los mortales
de la regia divinidad que consiguió aniquilar a la encarnación del mal.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">En aquel camino había cientos de
hombres, unos jóvenes y fuertes, otros ya maduros; algunos portaban a sus
hijos, casi todos varones; niñas como yo, de corta edad, no debía haber más que
una decena, y mujeres, muy pocas, sólo aquellas que conservan la fuerza en el
cuerpo a pesar de frisar el medio siglo en años. Me decía mi padre, y así lo
aseguraban otros hombres que nos acompañaban, que en otras peregrinaciones las
mujeres no pueden contarse ni con los dedos de una mano.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhmta38qIrKsa35wcQNQHhR_Dm62MS4D0x_9oyPt46V-jF8MnbrNahofeqXbDtRNDW7AQsULxdPBOEfa7TtmHIDOMhquEcc7R_c-3L9lcEr0gD1E7s5N307W1hGG9Q7s4kstkwOnk-pXO4/s1600/aa-Cover-bqnjounhi6jrtk863aa23n75g5-20180929015739.Medi.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="448" data-original-width="800" height="223" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhmta38qIrKsa35wcQNQHhR_Dm62MS4D0x_9oyPt46V-jF8MnbrNahofeqXbDtRNDW7AQsULxdPBOEfa7TtmHIDOMhquEcc7R_c-3L9lcEr0gD1E7s5N307W1hGG9Q7s4kstkwOnk-pXO4/s400/aa-Cover-bqnjounhi6jrtk863aa23n75g5-20180929015739.Medi.jpeg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">La leyenda sagrada nos cuenta que
Ayyappa prohibió entrar a su morada a las mujeres en edad de engendrar, desde
que la sangre maligna las hace impuras, pues su vientre y sus pechos dan la
espalda a dios, ofreciendo su carne a la carne, poniendo los ojos solo en el
hombre. Las niñas se quedarán en sus casas al cumplir los diez años, junto a
sus madres, abuelas si son estas jóvenes, y todas las mujeres que aún se
encuentren en edad de menstruar. <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">“El
dios Ayyappan es un Bramachari”</b>, decía mi padre. Ya siendo mujer supe
qué querían decir aquellas palabras. Ese dios que solo abre sus brazos al
varón y desdeña la fe y las semillas de tulasi que cuelgan de nuestros hermosos
cuellos, hace siglos que renegó del placer de la carne, castigando con su cobarde
celibato a las mujeres de mi estirpe.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">Cuando mis pies alcanzaron la
puerta del templo aquel día húmedo de abril, un rotundo sonido se me metió en
mi alma de niña; desde los oídos consiguió adentrarse con gravedad por entre
mis venas y pensamientos. Cada vez que el monje golpeaba con la maza el cobre
sagrado de Sabarimala, mi corazón bombeó con fuerza, con furia, pero también
con fe, para darme la valentía con que mirar a Ayyappan a los ojos y
preguntarle por qué, por qué yo no, por qué mi madre no, por qué mis hijas y
mis nietas, no.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><b>No hubo para aquella niña
respuesta</b>. Regresó a su casa, a su pueblo, para convertirse en mujer de la
tierra y de los hijos, también mujer del esposo. Mujer de todos, menos de sí
misma y del dios, pues para Ayyappan, ella tampoco era más que carne impura,
manos manchadas de sangre y de barro. Recordé muchas veces siendo joven el día
en que me sentí atravesada por el sonido sagrado del templo y quise aprender yo
a extraer de mi entraña las notas que anidaron mi corazón</span><span style="font-size: large;"> desde entonces.
Aprendí a tocar el </span><b style="font-size: x-large;">punjab</b><span style="font-size: large;">, a
tamborilear sobre su piel tensada los </span><b style="font-size: x-large;">gharanas</b><span style="font-size: large;">,
ritmos de mi tierra reservados casi siempre a los hombres. Y a golpe de tambor
me fui haciendo vieja, viendo a muchas niñas de la aldea visitar con sus padres
el templo de <b>Sabarimala</b> y a cientos de mujeres despedirlas, levantando sus
manos con tristeza y resignación.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><b>Pero llegó el día; los cielos y
sus dioses, los del entendimiento y límpido espíritu, sabían que llegaría el
día</b>. Fueron dos las valientes, que no siendo yo me representaban, con sus
cuerpos y sus almas, pues de mi hija y de mi nieta se trataba. Peregrinaron
camufladas con las prendas de hombre y sólo descubrieron sus rostros justo en
la entrada de Sabarimala. Las leyes de nuestro país ya habían dicho que aquella
prohibición debía ser abolida, por injusta y absurda, mas ninguna mujer se
había atrevido a encaminar los pasos hacia el templo, por miedo a la reacción
de sus esposos o vecinos.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">Tan pronto como mi hija <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">Neeja</b> y mi nieta <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">Divya</b>, <b>cuyo nombre significa “divina”</b>, se postraron ante las
túnicas de Ayyappan, sintieron sobre sus cabezas la reprobación de los hombres
del templo, en forma de hiriente mirada y grito grosero, ese que tanto ofende a
los dioses en los días del <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">vatham</b>.
Algunos las empujaron; otros las escupieron, enloquecidos por una rabia que
parecía inspirada por el mismísimo demonio. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">Terminaron siendo salvadas del horror
por la benevolencia de un monje de Ayyappan, que se apiadó de ellas y no dudó
en rescatarlas aunque ello le obligase a tocar dos cuerpos impuros. Ese día
comprendieron <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">Neeja y Divya</b> la gran
mentira del mundo y del hombre; vieron a los peregrinos piadosos transformarse
en fieras iracundas de corazón sombrío. Nada de dios hay en ellos; nada hay en
dios para el hombre.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhe70JNcKzde8xtAbTPuL1JswQhwOPJD63zb5nUCXLpv-1zwQ2RnsJPGa99bEb6B3dSlnH_4AeZIGwT8-KWPPAyE5yLxHHPQCLl-7NZB_u6P5z2s18pDUU29kJIkAnkh4dSC18d-AHEg7E/s1600/49578016_10161525765180294_6527156220292235264_n.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="619" data-original-width="960" height="257" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhe70JNcKzde8xtAbTPuL1JswQhwOPJD63zb5nUCXLpv-1zwQ2RnsJPGa99bEb6B3dSlnH_4AeZIGwT8-KWPPAyE5yLxHHPQCLl-7NZB_u6P5z2s18pDUU29kJIkAnkh4dSC18d-AHEg7E/s400/49578016_10161525765180294_6527156220292235264_n.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">Mi corazón pudo verlas allí, de
rodillas, insultadas y vejadas. Por cada grito de hombre, un golpe de mujer
sobre mi punjab. Esa era la llamada para todas las mujeres de Kerala, el
rotundo tambor que llama a la reunión y a la unión de las impuras. Que esta
sangre que nos une nos mueva. Ya no levantaremos la mano para despedir a los
peregrinos que parten hacia las montañas. Seremos nosotras quienes vayamos a la
montaña. <b>Démonos la mano, tú conmigo, hermana; tiende la tuya a la hija, a la
abuela, a la nieta</b>. Unidas con fuerza, desde la capital, en este primer día de
enero, recién comenzado<b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"> Makaravilakku</span></b>, hasta las mismísimas colinas que rodean
Sabarimala. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">El <b style="mso-bidi-font-weight: normal;">“muro de mujeres”</b> lo han llamado las gentes del mundo. Más de
seiscientos kilómetros de millones de manos unidas, de mujeres de Kerala que
han decidido que ellas también son dignas del dios Ayyappan y de cuantos haya
en la inmensidad del cielo. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBNhVcgKPBKl8pudf6ouAVDFu-DZMkvVlKqbrDuzeGDi7Ey3mBacnU7Xt6PeZGlwWL6cJv7e-f_prEOdqMt5nBIL7XcxqpLO7P7GsKQXs47E9EBlWcPvjx067juiJz6JM92IftxEjuj_g/s1600/49339608_1996468600471547_427942896331653120_n.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="450" data-original-width="900" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBNhVcgKPBKl8pudf6ouAVDFu-DZMkvVlKqbrDuzeGDi7Ey3mBacnU7Xt6PeZGlwWL6cJv7e-f_prEOdqMt5nBIL7XcxqpLO7P7GsKQXs47E9EBlWcPvjx067juiJz6JM92IftxEjuj_g/s400/49339608_1996468600471547_427942896331653120_n.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">Las más ancianas seguimos
apoyándolas a golpe de gharana, en armonía y fuerza consagradas a la misión que
la naturaleza nos reservó, la de dar vida y proteger la vida. Nuestras manos
entrelazadas han llegado hoy al templo, a pesar de todos los infieles que han
puesto el grito en cielo y en la tierra. Que suene hoy en todo cuanto conocemos la
música que nos llama a ser <b>iguales a los ojos del mundo y del hombre</b>.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihKLPi6qrfa9pholoe98LQcyKO0Y0xKV1adbAmlmrzETxjtiVm3IOgj_nFf5_ZE9qBAV1MtVM9SsZy7ptSCs6cWz_vHMg_cqt_vSVtYp4MKqURxdeut3Izu-PgT7B5fPKEszVLGgyB2vI/s1600/49835380_10161526452370294_5775536247707533312_n.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="505" data-original-width="960" height="210" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihKLPi6qrfa9pholoe98LQcyKO0Y0xKV1adbAmlmrzETxjtiVm3IOgj_nFf5_ZE9qBAV1MtVM9SsZy7ptSCs6cWz_vHMg_cqt_vSVtYp4MKqURxdeut3Izu-PgT7B5fPKEszVLGgyB2vI/s400/49835380_10161526452370294_5775536247707533312_n.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgLDC20yTlvmaoqAbRcBGTXSHLUAu977h8atjMpefbVK_ZgGbe1jklGplbP7KEWNdwfFIrhC8a1L-gCjWTIYsk-ilpapBY3TzBolwExcR1IHZyf9uY2GPIDclpVzBHkbNc1-2uFUaN_1tU/s1600/49485913_1996462613805479_4667308670999068672_n.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="960" data-original-width="720" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgLDC20yTlvmaoqAbRcBGTXSHLUAu977h8atjMpefbVK_ZgGbe1jklGplbP7KEWNdwfFIrhC8a1L-gCjWTIYsk-ilpapBY3TzBolwExcR1IHZyf9uY2GPIDclpVzBHkbNc1-2uFUaN_1tU/s400/49485913_1996462613805479_4667308670999068672_n.jpg" width="300" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<o:p><span style="font-size: large;"><br /></span></o:p></div>
<br />Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-79140725319497039452018-11-13T14:00:00.000-08:002018-11-15T12:33:39.939-08:00Traviesos caminos<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgC85Yv6JKnYGmlkOHvEHCjhkoAYjI6FmkVT0JACu84YxtcONg1KX_HGwW96rhq_nHkpUE8AMH0x2VuD51llXz5KSaY1Dv6NhbT7iw9HccG_9XsHJifpOry3yeRdEqt2z2pjeH1BIzx-gA/s1600/001372a9aeaf1360136c01.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="426" data-original-width="898" height="188" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgC85Yv6JKnYGmlkOHvEHCjhkoAYjI6FmkVT0JACu84YxtcONg1KX_HGwW96rhq_nHkpUE8AMH0x2VuD51llXz5KSaY1Dv6NhbT7iw9HccG_9XsHJifpOry3yeRdEqt2z2pjeH1BIzx-gA/s400/001372a9aeaf1360136c01.jpg" width="400" /></a></div>
<br />
Aprenden tus manos traviesos caminos<br />
que me hacen contorno,<br />
cubren mis hombros de tierno cobijo<br />
y pasean a escondidas<br />
hasta rodear<br />
mi geografía, sin tropiezo.<br />
<br />
Pestañeas tembloroso al llegar al abismo,<br />
son las vistas salvajes y parecen lejanas,<br />
mas pueden tus ojos correr peligrosas distancias,<br />
pues no hay viaje largo<br />
ni camino insondable<br />
si pueden los cuerpos<br />
reposar, contemplar<br />
la eternidad del paisaje.Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-20732047131944352722018-08-10T02:59:00.000-07:002018-08-10T02:59:06.054-07:00Lluvia de estrellas<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjUQCYk7u_LwdlbrXxVPyTakxTFb98elA_KEWKYBbFtrkg2GpzT7PZl__9oQ74qQdCGjwgtzE2EBigFcIV7RjExZhzAAiAY_WQT84v00VE8iXtV9NN3i1o31zzMutoQAGwOasv5cm3Aa98/s1600/1533372792_206080_1533373503_noticia_normal.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="450" data-original-width="770" height="187" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjUQCYk7u_LwdlbrXxVPyTakxTFb98elA_KEWKYBbFtrkg2GpzT7PZl__9oQ74qQdCGjwgtzE2EBigFcIV7RjExZhzAAiAY_WQT84v00VE8iXtV9NN3i1o31zzMutoQAGwOasv5cm3Aa98/s320/1533372792_206080_1533373503_noticia_normal.jpg" width="320" /></a></div>
<br />
Si esta noche miro al cielo, lo haré con inocencia, arqueando mi perfil, con la ilusión de que quiera soplarme los labios, aunque sea de puntillas, una brizna de fresco.<br />
<br />
Y quizá, con los ojos puestos sobre el caluroso negro, se me dibuje en la cara una fulgurante estela, recuerdo lejano de un cometa que ya se fue antes de que yo estuviera.<br />
<br />
O, allá, donde se recuesta Andrómeda, puede que vea la lluvia que colmó a la ninfa de dorada y traviesa deidad...<br />
<br />
Llorará esta noche el cielo. En cada lágrima, un cálido sueño y el deseo de poder ver de nuevo esa intrépida estrella pasar.<br />
<br />
#Perseidas2018 #lágrimasDeSanLorenzo<br />
#estrellafugazPalabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-8536664506882942922018-07-14T14:03:00.000-07:002018-07-14T14:03:34.871-07:00Caricia persa<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEji0IAq0RSU591rwYerCecGfCI9rZtPEY7sHJ6t84BoLfBsjTuPQxl5dtmzgOaCG98g1-kvm-p2VzkMc-7_HgFz1RdILlbGaLWn0YGJH4rtXeJvRbNpk5bjShhHlpBhrrj5bU8vMU9mT9I/s1600/c7fcb743705e76fac0dd69b05e7305ec.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="567" data-original-width="441" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEji0IAq0RSU591rwYerCecGfCI9rZtPEY7sHJ6t84BoLfBsjTuPQxl5dtmzgOaCG98g1-kvm-p2VzkMc-7_HgFz1RdILlbGaLWn0YGJH4rtXeJvRbNpk5bjShhHlpBhrrj5bU8vMU9mT9I/s320/c7fcb743705e76fac0dd69b05e7305ec.jpg" width="248" /></a></div>
<span style="font-family: sans-serif; font-size: 12.8px;"><br /></span>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: sans-serif; font-size: 12.8px;">Ayer en la tarde sentí cómo tus dedos mezclaban los colores de mi pelo, entre grises y blancos, perfumados con aire de Persia. Me hice un ovillo sobre tus piernas para que así se me hiciera el cuerpo caricia y me atravesase tu rayo sin dejar rincón dormido en mi curvatura de Musa.</span></div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: 12.8px; text-align: justify;">
<br /></div>
<div dir="auto" style="font-family: sans-serif; font-size: 12.8px; text-align: justify;">
Te clavé levemente las uñas, para hacerte saber que, aun con los ojos cerrados, podía verte la sonrisa dándome sombra. Moví con elegante suavidad la cola para corresponder tu cosquilleo y dulzura. Me dormí así, con unas manos paseándome, haciéndome el amor, mientras ella, celosa, desde el otro lado de la tormenta, temblaba de envidia y silencio.</div>
Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-49182811252768758972018-06-05T10:46:00.003-07:002018-06-06T02:04:23.884-07:00"Doll face". Buscando las palabras...<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEifWxw_ZjtjojuGPV_FJCxsrn9y8xQKQ8b0DjnksDsJqoOQTUiN5LOYNGKm3VG3oJb48cUNksEpzMuLdkSv_i9hlMWgF-QmMBnu1o6i9Tk5Rwl3QyIqPUtKuwiLNVSDKrEh0Za49tmcU38/s1600/doll+face.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1600" data-original-width="1128" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEifWxw_ZjtjojuGPV_FJCxsrn9y8xQKQ8b0DjnksDsJqoOQTUiN5LOYNGKm3VG3oJb48cUNksEpzMuLdkSv_i9hlMWgF-QmMBnu1o6i9Tk5Rwl3QyIqPUtKuwiLNVSDKrEh0Za49tmcU38/s320/doll+face.jpg" width="225" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Ilustración realizada por Sara Jiménez, 1º de Bachillerato. IES Valmayor</td></tr>
</tbody></table>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><i><b>Comparto con vosotros una actividad muy interesante con la que hemos puesto el broche al curso académico. A partir de las imágenes del vídeo <span style="color: #660000;">Doll Face</span>, los alumnos se han lanzado a escribir un texto, experimentando con su forma e intención, para plasmar en él las sensaciones o ideas que se hubieran despertado en ellos. </b></i></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><i><b><br /></b></i></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><i><b>Con distintos estilos, todos han sabido formular una <span style="color: #660000;">dura crítica contra los estereotipos de belleza y el consumismo alienante</span>. Os dejo una selección de textos de 1º de Bachillerato y uno de 2º de ESO. </b></i></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><i><b><br /></b></i></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><i><b><br /></b></i></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<iframe allowfullscreen="" class="YOUTUBE-iframe-video" data-thumbnail-src="https://i.ytimg.com/vi/zl6hNj1uOkY/0.jpg" frameborder="0" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/zl6hNj1uOkY?feature=player_embedded" width="320"></iframe></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><i><b><br /></b></i></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<b><u><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;">El espejo de Nora</span><o:p></o:p></span></u></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: right;">
<b><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;">Por Niko González, 1º Bach.<o:p></o:p></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><b>En el cuarto de Nora ya no había rastro de su
perfume y la luz cálida que hasta hacía un par de segundos iluminaba la
habitación estaba ya apagada. Si alguien hubiese tocado las teclas de su pequeño
piano de madera, probablemente habría sonado desafinado. Y rendida en la
alfombra, se encontraba la niña, como si de ella emanase una atmósfera de
penumbra. Su rostro parecía inerte. <o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><b>Nora volvió a alzar la mirada para ver que,
frente a ella, continuaba ese espejo reflejado en sus lágrimas. Una lámina
enmarcada que rompió la magia y que nunca debía haber estado ahí, descansando sobre
una de las paredes de su cuarto. <o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><b>Se acercó lentamente al espejo.
El camino le pareció interminable y, cuando por fin consiguió tocar el cristal
con el dedo índice, la bestia que en él se reflejaba le desgarró con sus zarpas el brazo, hasta llegar a la muñeca, por donde la tomó, arrastrándola
después al vacío. </b></span><o:p></o:p></span><br />
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi_IlJLCUWAZ6ARFMTTSmFwvTxXph7nI0NoIWJIPGYC3ghes4XWH0X0CKIyLPc3SZ6MVrrE16zI9K69as9nnF4DQdbwTUu7BlN7g6mat4fpczwVQkTUoJiOIcAqbPf44oP9mANXaW42yhY/s1600/mirada-80-x-80-cms-a%25C3%25B1o-2014-%25C3%25B3leo-sobre-lienzo-1002x1024.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="200" data-original-width="350" height="227" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi_IlJLCUWAZ6ARFMTTSmFwvTxXph7nI0NoIWJIPGYC3ghes4XWH0X0CKIyLPc3SZ6MVrrE16zI9K69as9nnF4DQdbwTUu7BlN7g6mat4fpczwVQkTUoJiOIcAqbPf44oP9mANXaW42yhY/s400/mirada-80-x-80-cms-a%25C3%25B1o-2014-%25C3%25B3leo-sobre-lienzo-1002x1024.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><br /></span></span>
<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<b><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><u><br /></u></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<b><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><u>3, 2, 1...</u></span><o:p></o:p></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: right;">
<b><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;">Por María Partida, 1º de Bach.<o:p></o:p></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Mi
estructura, mi cuerpo sale de una caja.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Una
caja donde me siento presa, mi mente y mi cuerpo están presos. Mi mente en
forma de televisión imagina mi yo, mi verdadero yo. <o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Me
quiero acercar un poco y un poco más. Casi estoy. <o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Esta
imagen que rebota contra mi mente se presenta con una piel impecable, con toques
rojos sobre las mejillas, los ojos perfectamente dibujados bajo el color de las
sombras, un rojo potente sobre mis labios…<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Sin
embargo, ¿soy yo o simplemente soy la persona que quieren que sea? ¿Dónde queda
mi interior? <o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Pienso.
Pienso y recapacito, ¿por qué?<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>¿Por
qué las mujeres estamos sometidas a seguir un canon? ¿No somos igual de bonitas
sin maquillaje? Pues sí, te lo aseguro.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>No
quiero vivir más así. Destruyo mi sueño de sentirme “normal” y aceptada por la
sociedad.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Y a
cambio noto algo. Ha merecido la pena.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Libertad,
sí, ese maravilloso sentimiento.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Qué
bien sienta sentirse libre, no seguir ninguna norma, no hacer caso de nada,
elegir qué hacer y qué decir. <o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Me
siento única, preciosa, maravillosa. Una MUJER.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>
</b></span></span><br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Ahora
sí, brillo más que nunca. Nada ni nadie me va a parar. Este es mi momento.</b></span><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRQisHt81OyQXZzJ_i1jFVfAOSlowLhZxikaMVkgyGyJun2ISHmwuCGXpBZ9P3AhIPCzJroMcDsllFU4zSy-Qnq-B4F8BpbrY91TFMhHqAzeQGJ8HULte1NVXGlKgecuFbx_athKq3skQ/s1600/M%25C3%25A1scara+ojos.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="400" data-original-width="383" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRQisHt81OyQXZzJ_i1jFVfAOSlowLhZxikaMVkgyGyJun2ISHmwuCGXpBZ9P3AhIPCzJroMcDsllFU4zSy-Qnq-B4F8BpbrY91TFMhHqAzeQGJ8HULte1NVXGlKgecuFbx_athKq3skQ/s400/M%25C3%25A1scara+ojos.jpg" width="382" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<b><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><u>Apariencias</u><o:p></o:p></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: right;">
<b><span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Alejandra Fernández, 1º Bach.</span></b><span style="color: #274e13; font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: right;">
<b><span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>¿De
dónde has sacado esos pantalones? Ya no se llevan.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>¿Cómo
puedes ir así vestida?<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>¿Y
esas ojeras? Tápatelas, te hacen súper fea.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Ponte
un poco de colorete, estás súper pálida.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Con
los ojos tan bonitos que tienes… Te quedaría mejor un poco de rímel.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>¿Y
ese pelo? Plánchatelo, liso te queda mejor.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Los
tacones estilizan las piernas. ¿Qué más da si luego te duelen los pies?<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Estar
cómoda es lo de menos. Para presumir hay que sufrir.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>¿Qué
más da cómo te sientas?</b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Al
fin y al cabo, lo físico es lo que importa.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Vivimos
en un mundo de apariencias, donde todos seguimos una serie de estereotipos
marcados por la sociedad. Una serie de objetivos que queremos cumplir. Cuánto
más cerca creemos estar de ellos, más nos alejamos, pero de nosotros mismos, de
nuestra propia identidad.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Y,
casi sin darnos cuenta, terminamos teniendo dos vidas, paralelas y completamente
diferentes, la propia y la que aparentamos tener.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Aparentar.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Vivimos
gastando dinero que no tenemos en cosas que no necesitamos para impresionar a
gente a la que no le importamos.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Pensemos,
¿de verdad merece la pena?</b><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;">
</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Dime,
¿realmente así eres feliz?</b></span><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh-lgk9sXiynpBRjVgnLSFCak-_huBHsGgM27m-MafOHLt9hH0QG6Z5DLbKAuqcjyZGvmxtpb-3BGbN1reBp7AnBxWNQnrBGVGX1uqXnGX3-0o5dkKdRjoAF_89w4gpURzOUhXeddI6Hl0/s1600/e68e1b0b6aa949debbb846169441d5dd--chronic-pain-chronic-illness.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="236" data-original-width="236" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh-lgk9sXiynpBRjVgnLSFCak-_huBHsGgM27m-MafOHLt9hH0QG6Z5DLbKAuqcjyZGvmxtpb-3BGbN1reBp7AnBxWNQnrBGVGX1uqXnGX3-0o5dkKdRjoAF_89w4gpURzOUhXeddI6Hl0/s400/e68e1b0b6aa949debbb846169441d5dd--chronic-pain-chronic-illness.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<b><u><span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><span style="color: #0c343d;"><br /></span></span></u></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<b><u><span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><span style="color: #0c343d;"><br /></span></span></u></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<b><u><span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><span style="color: #0c343d;">Deshaciéndonos del yo<o:p></o:p></span></span></u></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: right;">
<span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><b>Por Sanae El Kadi, 1º de Bach.</b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: right;">
<span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><b><br /></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="color: #0c343d;"><b><span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Vivimos, si se puede decir que lo hacemos... Porque no vivimos para nosotros, sino para la gente. Vivimos en un mundo de
engaño, donde el <i>yo</i> vale más que cualquier otra cosa, aunque para
completarlo haya que contar con el visto bueno de todos los demás.</span><span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><o:p></o:p></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="color: #0c343d;"><b><span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="color: #0c343d;"><b><span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Caminamos midiendo pasos, midiendo miradas
que nos contemplan, oyendo susurros que en realidad no existen, pero que
pretenden convencernos: “Si el de en frente es mejor, adelante, supéralo”.</span><span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><o:p></o:p></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="color: #0c343d;"><b><span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="color: #0c343d;"><b><span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Levantarse un día más, abrir los ojos y
ver desvanecerse los sueños.</span><span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><o:p></o:p></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="color: #0c343d;"><b><span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Hay que comenzar, sí, comenzar a
prepararse, no para mí, sino para la gente.</span><span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><o:p></o:p></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="color: #0c343d;"><b><span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Un día más, la sociedad no me puede
esperar. Tengo que darme prisa, prisa para deshacerme del yo y convertirme en
ella, porque, según dicen todos, ella es mejor.</span><span style="font-family: "times new roman" , "serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><o:p></o:p></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #0c343d;"><b>
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Empecemos pues a destruirnos.</span><span style="font-size: 11pt; line-height: 115%;"> </span></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #0c343d;"><b><span style="font-size: 11pt; line-height: 115%;"><br /></span></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<b><u><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #20124d;"><br /></span></span></u></b></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhO-uFt1DUTgFQLoa8R8H2XVe7nH6U4M0XIIOqKKVKQ8q9OhnaF2L7WaZso4EZYnyZHCFOHh3uo0nBZhZivjT7FdcbLiN-z3lu3WV71j6WWdMo3xDQCei0aRIwMNqGkgJUbEREzMk2TDmI/s1600/trapped-pic.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="400" data-original-width="400" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhO-uFt1DUTgFQLoa8R8H2XVe7nH6U4M0XIIOqKKVKQ8q9OhnaF2L7WaZso4EZYnyZHCFOHh3uo0nBZhZivjT7FdcbLiN-z3lu3WV71j6WWdMo3xDQCei0aRIwMNqGkgJUbEREzMk2TDmI/s400/trapped-pic.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<b><u><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #20124d;"><br /></span></span></u></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<b><u><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #20124d;">Atrapada<o:p></o:p></span></span></u></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: right;">
<b><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;">Por Por Amina Achehbar, 1º Bach.<span style="color: #20124d;"><o:p></o:p></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;"><br /></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;">Abro
poco a poco los ojos, acostumbrándome a la luminosidad de la habitación. Los restriego
y observo.<o:p></o:p></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;"><br /></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;">Pantallas
y pantallas me rodean. Otra vez he aterrizado en el mundo de los estereotipos,
ese que tanto evito. Me levanto del suelo y me analizo. Llevo una vestimenta
diferente de la que recuerdo, unos tacones de aguja, una falda dos dedos por
encima de la rodilla y una blusa con los primeros botones abiertos.<o:p></o:p></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;"><br /></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;">Arrastro
las manos hasta mi cara. Está embadurnada de esa asquerosa pintura tras la que
se esconde mi verdadero ser. Intento quitármela, como otras veces he hecho,
pero es imposible.<o:p></o:p></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;"><br /></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;">Camino
alrededor de la sala, centrándome en las miles de pantallas con las que quieren
mostrarnos cómo deber ser una sociedad perfecta.<o:p></o:p></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;"><br /></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;">Hay
un momento en que mi mirada se encuentra con otra. Me acerco y veo cómo una
chica, idéntica a mí, se refleja en la pantalla. Está sonriendo, luciendo
asquerosamente feliz, sin ningún rasguño, ninguna imperfección, como “toda una
señorita”. Ya lo sé, no es real, no es de verdad. Es otra de las mentiras a las
que tan acostumbrados estamos.<o:p></o:p></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;"><br /></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;">
</span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;">Intento
alejarme, pero ya es demasiado tarde. Unos brazos metálicos salen de la
pantalla, hago un intento de escaparme, pero, aun así, logra alcanzarme. Y lo
siguiente que recuerdo es que ahora soy la chica "perfecta" que antes
mostraba esa pantalla.</span></b><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;"><br /></span></b></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhwcBI0ilEVvWCr2I7IaPGlC14gXnLg8p4aJ3lEHXhk2aVS5vMAb_nipCUqzUSsyh1p-ByGLGwrGvpTBbKbTfujhlqe9pGDE7M4ByJOYnoCXmf_cgxxzdeG3nVjAB1kq5lMSMN_Ela9W3U/s1600/87073803-cyborg-se-hizo-a%25C3%25B1icos-en-polvo-ilustraci%25C3%25B3n-3d.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="277" data-original-width="450" height="245" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhwcBI0ilEVvWCr2I7IaPGlC14gXnLg8p4aJ3lEHXhk2aVS5vMAb_nipCUqzUSsyh1p-ByGLGwrGvpTBbKbTfujhlqe9pGDE7M4ByJOYnoCXmf_cgxxzdeG3nVjAB1kq5lMSMN_Ela9W3U/s400/87073803-cyborg-se-hizo-a%25C3%25B1icos-en-polvo-ilustraci%25C3%25B3n-3d.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #20124d;"><br /></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<b><u><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><br /></span></span></u></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<b><u><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;">Muñecas de porcelana<o:p></o:p></span></span></u></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: right;">
<b><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;">Por Carmen San Nicolás, 1º Bach. <o:p></o:p></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: right;">
<b><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><br /></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><b>Desde
hace mucho, mucho tiempo, se nos enseñaba a estar en casa como muñecas de
porcelana, la piel blanca y lavada, sin un rastro de maquillaje, como si
estuviésemos encerradas en un castillo. Pero, al final lo conseguimos, conseguimos abrir
esa puerta. Abrimos los ojos y vimos la sociedad, nuestra vida y la del mundo
que nos rodeaba. <o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><b>Desde
que se creó la televisión a principios del pasado siglo, nos mantuvimos así, con la
piel pálida. Tal vez sentíamos un poco de rubor, pero a escondidas y sin que se
notase mucho. Cada vez iban saliendo mujeres más bellas, aunque con la
tez más morena, un color de labios más rosa y más impactante. Poco a poco se fueron
creando unos nuevos cánones. Avanzamos, tensando más y más la
cuerda que nos separaba de ese castillo de donde habíamos salido. Pero queríamos,
sí, queríamos parecernos a esas bellas mujeres que salían por la televisión;
queríamos ser como ellas, porque así seríamos felices, o eso creíamos...<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><b><br /></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #660000;"><b>
</b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #660000;">Llegamos
al final, al final del mecanismo, hasta el punto en el que las imágenes que ansiábamos alcanzar se iban
alejando más y más de nosotras. Ya no podíamos seguirlas. Iban demasiado rápido,
tanto que el mecanismo terminó rompiéndose y, con él, nuestros sueños de ser
como ellas. Caímos y nos rompimos en mil trozos por haber querido ser muñecas
de porcelana.</span><u><o:p></o:p></u></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b><span style="color: #660000;"><br /></span></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<b><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><u>Dayana</u><o:p></o:p></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: right;">
<b><span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;">Por Arancha Calvo, 1º Bach. C<o:p></o:p></span></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Hola,
soy Dayana. Y no, no soy un robot.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Soy
una mujer como otra cualquiera,<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Sí,
como cualquiera.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Si
soy así es gracias a la sociedad en la que vivimos,<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Que
tira de nosotros para decirnos cómo debemos ser,<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Cómo
hay que ser para encajar.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>
</b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b>Pero
todo se me complica cuando no puedo tirar más de mí, cuando no doy más de sí y
ya no me guían. Ahora es mi turno y tengo que empezar a ser yo misma, aunque a mí
no me enseñaron a eso. Quizá por eso me siento rota, vacía... Ahora es el momento de aprender
a ser yo misma.</b></span><o:p></o:p></span><br />
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b><br /></b></span></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXtzqvnWrgJubTRAznPQ1qzH6byY8814ieeapFcbWfbpaJBGNljkqQevYHfs04O77hyphenhyphenknQ-FBNfwA5ggS_n6zj6Mn37cEXuakp7i_z3oy7mXqUoT9QBNKlobvppyv_1NC7KOxLz-Pc9oo/s1600/IMG_20180604_133357.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1600" data-original-width="1128" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXtzqvnWrgJubTRAznPQ1qzH6byY8814ieeapFcbWfbpaJBGNljkqQevYHfs04O77hyphenhyphenknQ-FBNfwA5ggS_n6zj6Mn37cEXuakp7i_z3oy7mXqUoT9QBNKlobvppyv_1NC7KOxLz-Pc9oo/s400/IMG_20180604_133357.jpg" width="281" /></a></div>
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b><br /></b></span></span>
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #4c1130;"><b><br /></b></span></span>
<br />
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b><u>Copias</u></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt; text-align: right;">
<span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><b>Por Jamila Amerziane, 2º ESO</b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt; text-align: right;">
<span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><b><br /></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Siempre tendemos a copiar lo que está
bien visto por los demás, lo que interesa a la sociedad, lo que llama la
atención...<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Pero nunca nos paramos a pensar cómo
engañamos a nuestro cuerpo y a nuestra mente haciéndonos creer que eso es lo que
nos gusta y lo que realmente queremos ser. Tememos la opinión de los demás, el
qué pensaran de mí.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>La mayoría nos comportamos como robots,
programados para copiar lo que vemos, lo que creemos que gustará y no lo que
nos gustará a nosotros y lo que nos hará felices. Finalmente, si se seguimos
haciendo lo que la sociedad nos impone y no lo que nosotros queremos, nos acabaremos rompiendo por dentro. Comprenderemos quizá entonces que hemos dejado de ser nosotros mismos. Nos
hemos convertido en una copia de otra copia que terminará convirtiéndose en otra
copia.<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<span style="font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>
</b></span></span><br />
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: "arial" , sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><span style="color: #274e13;"><b>Resulta bastante triste sentirse
obligado a cambiar por alguien a quien no le importamos, porque la gente que de
verdad nos quiere lo único que desea es vernos felices y satisfechos</b></span></span><span style="color: #222222; font-family: "arial" , "sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;">.<o:p></o:p></span></div>
</div>
</div>
<br />Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-83649744118429522722018-05-23T10:50:00.000-07:002018-05-23T10:50:58.109-07:00Mis musas, las maestras<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi29nY2ftoPnpRqfkvByUcGExywO73oa9egTSYGeVWDJhX9A5WDpdQJXOas2y531K5rJ36V_92IEeYSP_ArGh2QK3Hw9sb9XVLZ73CCGOrJR-igBXiraiClL5vSsaX9GB_uqqBCE7x_7F4/s1600/maxresdefault.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi29nY2ftoPnpRqfkvByUcGExywO73oa9egTSYGeVWDJhX9A5WDpdQJXOas2y531K5rJ36V_92IEeYSP_ArGh2QK3Hw9sb9XVLZ73CCGOrJR-igBXiraiClL5vSsaX9GB_uqqBCE7x_7F4/s400/maxresdefault.jpg" width="400" /></a></div>
<br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;">No
sé qué me pasa últimamente, pero no me siento muy motivada, así en líneas
generales y, más particularmente, a la hora de escribir. No me quiero dejar
arrastrar, aunque siempre se ha dicho que la creatividad es una cuestión de
inspiración, <b>¿dónde estáis musas, que me tenéis abandonada?</b> Nada me mueve y la
sensación me deja con el corazón estancado. Quizá, si pusiera más interés por
la actualidad informativa y viese el telediario de vez en cuando, podría llegar
a sentir indignación ante la desvergüenza de muchos de los personajes del
panorama social y político, alentándose desde mis entrañas un fogonazo
contestatario que termine por despertarme ya de este sopor existencial mío.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;">Veo
que mi compañera de trabajo, muy querida y admirada por otra parte, luce en su
mochila de profesora un pin con la bandera de la República española. Raquel
celebra su cumpleaños<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>este sábado, día
14 de abril, orgullosa de soplar velas el mismo día en que se conmemora la
proclamación de la II República Española. Mi amiga se considera una firme
defensora de que nuestro país se transforme radicalmente e instaure la tercera
y definitiva república que, según ella, nos proporcione un sistema
verdaderamente democrático, en el que prevalezca la justicia, la igualdad de
todos los ciudadanos ante la ley que debe ampararnos, más allá de nuestras
diferencias culturales, religiosas, ideológicas o económicas.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;">La
escucho con mucha admiración, porque veo que sabe mucho y muestra conciencia
política y social. Yo, que pertenezco a la generación postfranquista y nací un
año antes de que se firmase la Constitución Española, crecí escuchando en casa
lo bueno que había sido nuestro anterior rey, Juan Carlos I; todo eran elogios
a la hora de valorar su papel institucional en la denominada Transición, pues, según
nos han contado, supo conciliar posturas, dar cabida en el<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>nuevo escenario democrático a todas las
posiciones políticas, incluso a las que durante décadas tuvieron que vivir en
el exilio y fueron perseguidas en razón al color de su bandera.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><b>Me
declaro muy ignorante en muchos aspectos relacionados con la historia reciente
de España</b>. Quizá lo sea porque en los años que tuve que estudiarla había muchos
temas que seguían tratándose de manera muy edulcorada, y a veces sectaria, pero
también por cierta dejadez . Creo que mi actitud habría sido bien distinta si
la vida me hubiera puesto en el aprieto de tener que sufrir en mis propias
carnes las consecuencias de las injusticias, del reparto desigual de las
riquezas, que encumbra a una minoría y arrincona a tantos, esposándolos a una
realidad socioeconómica en muchos casos insostenible. La tibieza de pensamiento
se tornaría indignación, furia interna incontrolable, si hubiera sentido que
mis derechos y libertades han sido quebrantados por algún grupo de poder, ya
sea el Estado o por parte de los llamados poderes fácticos…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjq0s-QCckZS-MFQeXGywuaAgZKLrwv5_mKbMD3yPowWAnAE6UyWWBkDto95u2bZ584b1c4WfWtX_GyG7VsyLcMrOM4KQPuksK6RBCvkJlfLaFSgR-Q6NV6I734GIzFneUP1T9H639HFoQ/s1600/3032469944_a54be9be08_o.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1024" data-original-width="1280" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjq0s-QCckZS-MFQeXGywuaAgZKLrwv5_mKbMD3yPowWAnAE6UyWWBkDto95u2bZ584b1c4WfWtX_GyG7VsyLcMrOM4KQPuksK6RBCvkJlfLaFSgR-Q6NV6I734GIzFneUP1T9H639HFoQ/s400/3032469944_a54be9be08_o.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;">He
leído algunos textos sobre la <b>II República</b>. Creo que entiendo, en líneas
generales, cuál fue el propósito republicano después del reinado de Alfonso
XIII y la dictadura de Primo de Rivera. Reconozco, sin embargo, que me he
perdido en la maraña de acontecimientos políticos que se sucedieron en los dos
bienios que abarcó la segunda República “en paz”, entre
republicanos-socialistas, el partido republicano radical, la Confederación
Española de Derechas Autónomas, la Revolución de 1934, que representó la
insurrección anarquista y socialista y el posterior Frente Popular, que, tras
las elecciones generales de 1936, solo pudo gobernar cinco meses, hasta que el
18 de julio de ese mismo año tuvo lugar el golpe de Estado por una parte del
ejército que desembocó en la guerra civil española. Por no hablar de la llamada
segunda República en guerra, de 1936 a 1939. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;">Llegados
a este punto me doy cuenta de que <b>no es nada fácil bucear en el pasado y comprender
las razones y sinrazones que conducen a un país a una guerra</b>. Creo, de hecho,
que fue entonces, en aquellos tres años terribles, donde terminaron de
forjarse, a fuego lento y ensañado, las etiquetas, los colores, los prejuicios
que han mantenido enfrentados a los ciudadanos de este país: rojo, morado,
azul, fascista, comunista, franquista, derechas, izquierdas, y otras heredadas,
marxistas, leninistas, anarquistas… No quiero ni entrar a descrifrar qué
significa ser una cosa o la otra. Yo he terminado convirtiéndome en una mujer
adulta, con cierta instrucción, del siglo XXI, sin el resguardo de ninguno de
esos paraguas, aunque quizá sí a la sombra del que eligió mi familia para
significarse políticamente. Mis padres, que vivieron la represión franquista y
estudiaron Geografía e Historia en los últimos años de la dictadura, se
declararon siempre firmes defensores de la democracia y de la Monarquía constitucional
que se instauró con Juan Carlos I y continua, de momento, con Felipe VI…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;">Pero
<b>quiero pensar que el concepto de República tiene mucho más calado y trasciende
las banderas y la cuestión política e institucional </b>(tendré que seguir
madurando en este sentido mis posiciones como ciudadana comprometida que aspiro
a ser). Porque yo miro a Raquel, observo su trato con los alumnos, escucho sus
opiniones sobre lo que debe ser la escuela y su análisis de la realidad
educativa y veo en ella a una mujer comprometida con su trabajo, que está
convencida de que la educación debe ser pública, de todos para todos, porque
todos tenemos los mismos derechos, porque la educación es un derecho, y veo que
ella, como otros tantos compañeros a los que me honra haber conocido, ofrece lo
mejor de sí misma al alumno pobre, al rico, al que tiene dificultades en el
aprendizaje y al que se le desborda el intelecto, a la chica peleona que
despotrica contra todo, a la muchacha del pañuelo, al chaval de trato amable y
al que osa, desde la más supina ignorancia, cuestionar la calidad de un texto
de García Lorca. Me gusta su espíritu crítico y me encanta escucharla hablar de
cuestiones muy candentes y actuales, como el feminismo. No sé si comparto todo
cuanto ella defiende, pero sí sé que contar con ella, con su visión del mundo,
de la vida, de la educación, de la literatura, resulta del todo estimulante y
enriquecedor.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;">Y
como ando en este momento vital tan confuso y no daba con el aire que quería
darle a este texto, pensé que sería buena idea comentarle a Raquel que tenía
que preparar para mi próxima reunión de Empiñadas algo relacionado con la
República. Le estuve hablando de que tenía en la cabeza hablaros de <b>las
Sinsombrero</b>, nombre con el que se conoce a la generación de
mujeres pintoras, poetas, novelistas, ilustradoras, escultoras y
pensadoras, que a través de su arte y activismo desafiaron y cambiaron las
normas sociales y culturales de la España de los años 20 y 30: <b>Teresa León,
Ernestina de Champourcín, María Zambrano, Rosa Chacel, Maruja Mallo, nombres
silenciados de la historia oficial de la generación del 27, entre muchos otros…
</b>y pensé en ellas porque hacerlo significaba querer entender su contexto
histórico, que abarca los años de la dictadura de Primo de Rivera, la República
y la guerra civil. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;">Aunque
a Raquel creo que le pareció interesante la idea, sobre todo porque los
profesores de Lengua y Literatura llevamos años queriendo reivindicar los
nombres de todas estas mujeres como legítimas representantes de la clase
intelectual española de aquel momento, me sugirió un tema si cabe más oportuno.
<b>¿Por qué no hablas de las maestras de la República?</b> Así podrías mostrar qué
representaron las ideas republicanas para la educación…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";">Aunque los entresijos políticos e
históricos que sustentaron la República me hayan resultado difíciles de
asimilar, así en una primera lectura, mi compañera me hizo ver que había una
cuestión mucho más próxima a mí y que, sin lugar a dudas, constituye el punto
de partida para cualquier propuesta ideológica que pretenda enarbolar la
bandera de la libertad y la igualdad entre las personas. <o:p></o:p></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQwv2yznfvlfsTplO6CdfSTyBwye-CyWSpHsdsmSxs8U4wne8b3PBg4Q93EeGtOi8NaSLg3lhycVIJUwNLnPCINpdyDO1C4vDzEC5pUpxHX_8c-b_BOh3Cjkd7xvXzm6Df_eioSLwfCxI/s1600/educacion_baja.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="233" data-original-width="550" height="168" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQwv2yznfvlfsTplO6CdfSTyBwye-CyWSpHsdsmSxs8U4wne8b3PBg4Q93EeGtOi8NaSLg3lhycVIJUwNLnPCINpdyDO1C4vDzEC5pUpxHX_8c-b_BOh3Cjkd7xvXzm6Df_eioSLwfCxI/s400/educacion_baja.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";"><br /></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";"><b>Uno de los grandes compromisos
sociales de la democracia de la Segunda República fue la educación,</b> pues solo
acercando el saber y la cultura a todos los ciudadanos sería posible asegurar
una sociedad libre e igualitaria, con criterio para elegir su destino desde el mismísimo
conocimiento de causa. <b>El objetivo era configurar el estado docente, que
llevaría la enseñanza a los rincones más remotos del país para construir una
sociedad más justa, equitativa y solidaria.</b><o:p></o:p></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";"><br /></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";">Las <b>maestras de la República</b>, o
sencillamente republicanas, tuvieron un papel principal en este propósito, pues
participaron de forma comprometida y valiente en su desarrollo material. En
aquellos años 30, estas profesionales representaban el modelo de mujeres
modernas e independientes. <b>Ellas serían las responsables, en buena medida, de
la construcción y difusión de la nueva identidad ciudadana</b>, al educar a su
alumnado en los valores de igualdad, libertad y solidaridad, tanto a través de
la transmisión en los contenidos en las aulas como, sobre todo, con su ejemplo
personal. Algo que nos suena ahora a rabiosa actualidad, al colmo de la
reivindicación de la educación en valores, fue ya una realidad hace más de
setenta años. Estuvimos en el camino de convertirnos ya, a comienzos del siglo
XX, en la sociedad moderna en la que aún hoy aspiramos a convertirnos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiJzb_ZnamN6C674rG5amtm_ivPKWmxCxUvfM_MFgb1eU_Ut47uQ8lwQtX3YkFSQeyTWyfP-_lS_THSKioxueXZsDSP1Lugne3Ydiv6qO0D6TDxHLhFjijAJuBzmpijuwmfKt-WPIV6C0g/s1600/educacion_baja.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="233" data-original-width="550" height="168" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiJzb_ZnamN6C674rG5amtm_ivPKWmxCxUvfM_MFgb1eU_Ut47uQ8lwQtX3YkFSQeyTWyfP-_lS_THSKioxueXZsDSP1Lugne3Ydiv6qO0D6TDxHLhFjijAJuBzmpijuwmfKt-WPIV6C0g/s400/educacion_baja.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";"><br /></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";">Estas maestras trabajaron con denuedo
en las aulas de todo el país desde el más absoluto compromiso con la igualdad
social y de género. Como nos cuentan en el documental que se les ha dedicado y
que os recomiendo, fueron conscientes de que cada paso que daban representaba
el dibujo del camino por el cual otras transitarían". <b>Se embarcaron en los
viajes de estudios, participaron en las Misiones pedagógicas, ocuparon puestos
de dirección en los colegios y formaron parte de organizaciones sindicales,
políticas y asociaciones feministas y ciudadanas.</b> Fueron pioneras en diversos
procesos de innovación y prácticas pedagógicas que abrían las aulas a una
metodología activa y participativa. Sentaron las bases de una propuesta
educativa que actualmente consideraríamos del todo revolucionaria y que, en
caso de que nuestro sistema de enseñanza la incorporase, nos conduciría, casi
con toda seguridad, a un éxito rotundo en materia de educación. <b>Ríase usted de
Finlandia.</b><o:p></o:p></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";"><br /></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";">Porque creían en la igualdad
derribaron los muros que separaban a los alumnos y alumnas, apostando por la
enseñanza mixta y laica, pues creyeron que así era posible compartir intereses
y conocimientos desde la igualdad, dejando de lado los condicionamientos
sociales, culturales o religiosos. <o:p></o:p></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";"><br /></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";"><b>Este ambicioso proyecto pedagógico
quedó interrumpido tras la guerra civil,</b> con la represión ejercida por el bando
vencedor sobre el ejercicio del magisterio por parte de estas maestras. Se
intentó acabar con ellas tanto física como simbólicamente, persiguiendo los
valores de igualdad y autonomía que representaban. Además, con el
franquismo, se produjo una intolerable injerencia del Estado y la Iglesia en lo
referente a la enseñanza, con el consiguiente menoscabo en el ejercicio de la
función pública docente. Durante la dictadura, no ejercieron el magisterio los
mejores profesionales, sino aquellos, a veces de dudosa preparación, elegidos
por su afección al nacionalcatolicismo.<o:p></o:p></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";">Afortunadamente, en los últimos
cuarenta años mucho han cambiado las cosas en materia de educación. Hay, sin
embargo, diversos aspectos que precisan de una profunda transformación, sobre
todo en lo referido a la metodología y la cuestión pedagógica, pues todavía en
nuestro siglo se sigue pretendiendo que todos los estudiantes respondan a un
único perfil académico, a un canon a veces inalcanzable. La atención a la
diversidad conforma un capítulo cada vez más importante para quienes legislan;
lo mismo ocurre con el apartado referido a la educación en valores. No podría
ser de otra manera, pues <b>una sociedad moderna y plural como la nuestra debe
velar por que cada uno de quienes la conforman tenga acceso a una educación que
le permita convertirse, en condiciones de igualdad y libertad, en ciudadanos
activos y participativos en la vida social, económica y política de nuestro
país</b>.<o:p></o:p></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";"><br /></span></div>
<div style="background: white; line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: "Arial","sans-serif";">Somos muchos los profesores
comprometidos con este objetivo, doy fe de ello, pero hay unos pocos que
parecen traer el testigo de quienes, en otro tiempo, defendieron ya los mismos
ideales. <b>Mi compañera y amiga Raquel es una de estas maestras de hoy que
trabajan para reivindicar el derecho a una educación pública que garantice los
principios de igualdad y libertad</b>, pues solo de esta manera podremos decir que
vivimos en una verdadera democracia. Ella y las maestras de la República han
terminado por convertirse en mis musas; han venido a despertarme de mi sopor, a
darme un nuevo contenido y ganas renovadas para ilusionarme con lo que de
verdad me mueve e ilusiona, ser maestra, y por lo que parece, republicana.<o:p></o:p></span></div>
<br />Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-1980874879636494912018-05-01T07:53:00.000-07:002018-05-01T10:47:46.242-07:00Tristeza de otras vidas<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjcg3PxShvuWkxgJQ3dj2R54HZnHJROywM_AbZT1GnEXnk9jMO-EKBAB7Mbm31FQFHy-I4dYgWZwtnL3K88u3EkReeD9l6rijrywKKmMRmAB9-9QrdFCVd9mDKwYv2jKAyInAfrl-75hTg/s1600/orfeo-y-eurc3addice.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="607" data-original-width="500" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjcg3PxShvuWkxgJQ3dj2R54HZnHJROywM_AbZT1GnEXnk9jMO-EKBAB7Mbm31FQFHy-I4dYgWZwtnL3K88u3EkReeD9l6rijrywKKmMRmAB9-9QrdFCVd9mDKwYv2jKAyInAfrl-75hTg/s400/orfeo-y-eurc3addice.jpg" width="328" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Orfeo y Eurídice</td></tr>
</tbody></table>
<br />
Me traen tus ojos tristeza de otras vidas,<br />
Huelen a hierba cansada de ocre y lluvia.<br />
Dibujas con el lápiz de la negrura<br />
la leve sonrisa que apenas sonríe.<br />
<br />
Me sabe a ceniza tu piel enjugada,<br />
a fruta demasiado madura la lágrima<br />
que te atraviesa e ignora el camino de vuelta a la herida.<br />
<br />
Me inunda de hastío recibir tu mirada,<br />
Me llega tu amor secuestrado<br />
que a un tiempo me seduce y me mata.<br />
<br />
Yo no sé qué secreto encierran tus cejas, arco y sombra<br />
de un sueño antaño irisado,<br />
convertido hoy en párpado crepuscular<br />
donde duerme y te acuna<br />
quien sin sueño<br />
llora contigo la negra amargura.<br />
<br />
Vuelva a ti la luz,<br />
Sal ya de ese extraño mundo;<br />
sigue las notas de mi voz y mis pasos;<br />
dormirán a tus furias<br />
y te salvarán de la bestia<br />
y de la insondable oscuridad.<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<br />
<br />
<br />
<br />
<br />Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-13571631386915612812018-04-01T09:46:00.000-07:002018-04-02T01:58:03.381-07:00El abrazo eterno<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgV4_S65p6C4SvvrPYvoSJ7cZKTdd-k1h_vmVvpaLenqx3xnSfmM4X9nVHzTyA3aIPI_9T5KvX0ky8YCWiOdD8Np5ws-ToWRFJ4F3SCuiJfiAthUUlPH7cxg-TC6TR7DUTIUa2gonCOITY/s1600/4-Venus.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="584" data-original-width="530" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgV4_S65p6C4SvvrPYvoSJ7cZKTdd-k1h_vmVvpaLenqx3xnSfmM4X9nVHzTyA3aIPI_9T5KvX0ky8YCWiOdD8Np5ws-ToWRFJ4F3SCuiJfiAthUUlPH7cxg-TC6TR7DUTIUa2gonCOITY/s400/4-Venus.gif" width="362" /></a></div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
Hay órbitas destinadas a esquivar el repetido camino, el previsible horizonte elíptico que nos acerca y aleja del sol, que nos obliga a consumir inviernos soñando con otras estrellas.</div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
Se cansó de girar con los ojos cerrados. Venus detuvo sus pasos y esperó al guerrero, el del corazón de fuego y la mirada encendida. Un mundo los separaba, cielos inmensos, aguas hechas de tiempo ya ido, selvas inexploradas de silencio convertido en desierto.</div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
A Marte no le importó. Dio tres pasos al frente y se olvidó del camino. Desde allí, la miró traspasando un planeta entero, con los brazos llenos de amor. Aprendió a respirar, a caminar, a nadar, para recorrer la oscuridad y encontrarse con la tintineante luz que impaciente lo espera.</div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
Dicen que se alinean cada mil años la diosa y el guerrero, que se funden más allá de la Tierra que los separa, hasta dejarse sin aire. Palpita el corazón bajo la curvatura de su pecho y siente el de él arderle por dentro. </div>
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
Retumba desde entonces el eterno abrazo<br />
que hizo tambalearse al universo entero.<br />
<div style="text-align: left;">
<br /></div>
Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-87209547955839625842018-01-29T13:02:00.002-08:002018-01-29T13:02:19.467-08:00Cuando el Homo dejó de ser sapiens. #DíaDeLaPaz<div style="background-color: white; color: #141823; font-size: 14px; line-height: 19.32px; margin-bottom: 6px; margin-top: 6px;">
<div style="text-align: justify;">
<div style="line-height: 19.32px; margin-bottom: 6px; margin-top: 6px; text-align: start;">
<div style="text-align: justify;">
<div style="line-height: 19.32px; margin-bottom: 6px; margin-top: 6px; text-align: start;">
<div style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg8S0pYAcStQZW64QvlbMldCvBJezsx3DFkED6uC1Xgu_gZ2JnDy2PTnSrpfp0UcxwuMTpk84j9NlOljfFZYEmJwT6wY7owW5gYM3v45qD17V5WAK3AxSB5lEtf6Npd1R0ZH3qTtv-z2hM/s1600/Evolucion+e+involucion+del+hombre.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="200" data-original-width="782" height="101" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg8S0pYAcStQZW64QvlbMldCvBJezsx3DFkED6uC1Xgu_gZ2JnDy2PTnSrpfp0UcxwuMTpk84j9NlOljfFZYEmJwT6wY7owW5gYM3v45qD17V5WAK3AxSB5lEtf6Npd1R0ZH3qTtv-z2hM/s400/Evolucion+e+involucion+del+hombre.png" width="400" /></a></div>
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><b>30 de enero de 2018</b></span><br />
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><b><br /></b></span>
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;">La violencia es a veces silenciosa y consigue enraizarse allá donde nadie la espera ni desea jamás. Se impregna maliciosamente en el lenguaje, en los gestos y miradas de nuestros jóvenes, los mismos que un día tomarán el testigo y tendrán que velar por nuestro futuro, por nuestra evolución...</span><br />
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><br /></span>
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;">“¿Os acordáis de mi primera clase? En ella os explicaba cómo y por qué aparece el lenguaje humano; la capacidad lingüística surge como consecuencia de la inteligencia. Hasta que los primeros homínidos no contaron con un cerebro lo suficientemente desarrollado no apareció el lenguaje, la posibilidad de comunicarse con otros miembros de la especie a través de la palabra. La comunicación humana ha ido perfeccionándose desde entonces a medida que los individuos y las sociedades que estos han constituido han evolucionado. Así que nuestra lengua, la que estudiamos en esta clase, es espejo de nuestra inteligencia, de manera que es preciso y necesario cuidarla y formarnos en su correcto uso, pues ella nos permitirá dar forma lingüística a nuestro pensamiento y será el vehículo de entendimiento con otros. Esa debería siempre ser el arma para resolver cualquier desencuentro”.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><br /></span></div>
</div>
<div style="line-height: 19.32px; margin-bottom: 6px; margin-top: 6px; text-align: start;">
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;">“Por otra parte, pensad que en esas primeras etapas de la vida del hombre, cuando ya se le puede llamar “Homo sapiens”, y en las que no existían las naciones ni las banderas ni las religiones ni las lenguas, si me apuráis igual ni los nombres, no había etiquetas. La vida giraba en torno a un objetivo común, subsistir como especie, no sucumbir a los avatares del ciclo natural del planeta, no desaparecer. Habría disputas, no lo dudo, pero por cuestiones relacionadas con el mantenimiento del “ciclo sin fin”, la cadena trófica.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><br /></span></div>
</div>
<div style="color: black; font-size: medium; margin-bottom: 6px; margin-top: 6px; text-align: start;">
<div style="color: #141823; font-size: 14px; line-height: 19.32px; text-align: justify;">
<span style="font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;">El hombre descubrió el fuego, inventó la rueda y comprendió las inmensas posibilidades que para él había en el mundo. Durante miles de años nos hemos diversificado, hemos evolucionado y afortunadamente hemos alcanzado cotas insospechadas de desarrollo que nos alejan de las cavernas. O no.</span></div>
<br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="color: #141823; font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: 14px;">Se nos ha olvidado que seguimos formando parte de la misma especie, que deberíamos estar velando por asegurar nuestra pervivencia en el planeta. En la era de las comunicaciones globales, la palabra, el lenguaje humano, no parece ser muy útil para asegurar la convivencia entre los pueblos. Se ha abandonado el objetivo común; cada pueblo, el pequeño en el que vivo y la nación más lejana, busca su propio interés, sea del tipo que sea. Levantamos banderas; apelamos a la lengua, a la religión, al dinero (por tenerlo o por carecer de él). Las guerras del pasado parece que no han servido para aprender que hay caminos que es mejor no transitar. Tal es la soberbia humana que hemos terminado por olvidar que somos caducos, que nadie se va de este mundo con riquezas ni ideologías, pero que sí deberíamos preocuparnos por dejar un lugar habitable para las generaciones venideras.</span></div>
<span style="color: #141823; font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: 14px; line-height: 19.32px;"></span><br />
<span style="color: #141823; font-family: "helvetica neue" , "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: 14px; line-height: 19.32px;"></span><br />
<div style="color: #141823; font-size: 14px; line-height: 19.32px; text-align: justify;">
<span style="font-family: "helvetica neue", arial, helvetica, sans-serif;">Así que, chicos, yo no sé de política ni de Historia, pero repasando todo lo que os he contado, quizá deberíamos pensar en “involucionar” un poco, volver a los orígenes, a cuando no había banderas, países ni lenguas para recuperar la consciencia y ver cuál debe ser el objetivo de nuestra especie: sobrevivir. Yo estoy por hacerme “Homo sapiens”, mirad lo que os digo”. Cuando por fin he terminado de hablar (me han escuchado atentos y lo he agradecido), la más habladora</span><span style="font-family: "helvetica neue", arial, helvetica, sans-serif;"> del grupo ha puesto la guinda, justo antes de sonar el timbre, con un “pues yo también me hago Homo Sapiens de esos, profe”.</span></div>
</div>
</div>
</div>
</div>
</div>
Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-858443332836675754.post-59551648668931188502017-11-24T12:49:00.001-08:002017-11-24T22:59:59.400-08:00La lágrima en el beso<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhpEqazyoT0d_4xJzluApnlZkFVT7yA8H-lRpIaAkSG23i_Rk00UV836VxRffpOIlS8xL-lpURM9Q4spG7NkSHc0M9qICDPsYiPey3gSvJGKr_kfYUWjE_20QnA-8w9OORzy4MgOsBbXQ0/s1600/IMG-20171124-WA0026.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1102" data-original-width="1495" height="293" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhpEqazyoT0d_4xJzluApnlZkFVT7yA8H-lRpIaAkSG23i_Rk00UV836VxRffpOIlS8xL-lpURM9Q4spG7NkSHc0M9qICDPsYiPey3gSvJGKr_kfYUWjE_20QnA-8w9OORzy4MgOsBbXQ0/s400/IMG-20171124-WA0026.jpg" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Dibujo de Gloria Gallego</td></tr>
</tbody></table>
<br />
Se me ha caído un beso<br />
delante de tu boca;<br />
me tembló el pulso y la sonrisa<br />
y, justo cuando tendría que haber<br />
fruncido los labios<br />
para silenciarte y envolverte,<br />
me interrumpió una palabra<br />
que me vino de dentro,<br />
para nombrarte y pedirte un pañuelo.<br />
La muy inoportuna se me adelantó<br />
para secar la náufraga lágrima<br />
de mi pobre y espachurrado beso.Palabras cardinales. Emilia Ruizhttp://www.blogger.com/profile/12581248581326793782noreply@blogger.com0